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No te pierdas este Mazda MX-5 transformado en un Lancia Beta

Descubre este peculiar restomod visto en el SEMA Show 2023.

no te pierdas este mazda mx-5 transformado en un lancia beta

El Mazda MX-5 es uno de los coches más empleados en proyectos alocados como el que vas a conocer a continuación. Quizá te sorprenda ver un logotipo de Lancia sobre el biplaza japonés, pero la realidad supera muchas veces la ficción.

En el SEMA Show 2023 de Las Vegas, nuestros compañeros de Motor1.com Global se toparon con un extraño MX-5, no tanto por su forma, sino por haberse transformado en un Lancia. En concreto, en el Beta, que en Estados Unidos se comercializó con el nombre Scorpion.

Regreso al futuro

Primera peculiaridad: este Mazda MX-5 RF está debidamente matriculado como un Lancia Scorpion de 1978 en Florida. Curioso, porque no tiene nada del deportivo italiano, ni siquiera medio tornillo.

El excéntrico deportivo está firmado por McHugh’s Automotive Group, un taller estadounidense de carrocería. Nuestros colegas de Motor1.com Global tuvieron la oportunidad de hablar con el propietario, Jim McHugh, quien explicó cómo efectivamente hay un rastro del ADN de Lancia en el diseño.

De hecho, se construyó para un entusiasta de la marca italiana deseoso de llevarse a casa el restomod de un Beta (Scorpion). Lástima que encontrar uno en buen estado fuera imposible. De ahí la idea: ‘destripar’ un Mazda MX-5 ND e implantarle piezas de otros coches. ¿De cuáles?

Cortar y coser

Empecemos: la trasera es de un Lotus Elise, el escape es de un Honda Civic Type R, los faros proceden de un Porsche Macan, el capó es de un Pontiac GTO y los pilotos redondos (homenaje al Lancia 037) son de una moto. En total, los hombres de McHugh tardaron unas 3.100 horas en completar el trabajo.

El resultado es una especie de Frankenstein sobre ruedas. Es verdad que no hay rastro de la elegancia clásica de Lancia, pero hemos visto proyectos mucho peor finalizados, la verdad.

¿El motor? Se ha quedado el que estaba, es decir, el bloque atmosférico de gasolina 2.0 SKYACTIV-G de 184 CV. Al menos en este caso se salva la tradición: la tracción sigue siendo trasera, como en el Beta original.

Naturalmente, el interior de este Lancia tan especial también ha sido modificado: supresión del monitor central, botón de arranque colocado entre los asientos, reloj analógico ubicado en el salpicadero, volante completamente nuevo y mucho más. ¿Qué te parece esta elaboración tan especial?

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