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VÍDEO| Prueba del Suzuki S-Cross AWD 2022: un coche honesto

El Suzuki S-Cross está pasando de forma discreta en el mercado y es una lástima, porque es un buen producto que cumple bien y tiene un precio muy razonable para lo que ofrece a cambio. Vamos a ver todo lo que da de sí este modelo.

Suzuki es una de esas marcas que ofrece una serie de productos muy interesantes y que no son lo bastante conocidos, como el Ignis, único por su tracción total y versatilidad condensada en menos de cuatro metros. Otro de esos coches poco frecuentes pero que está muy bien resuelto es el Suzuki S-Cross, que se sometió a un importante lavado de cara hace más o menos un año y que tiene buenas cualidades a un precio competitivo.

En esta vídeo prueba examinaremos al tope de gama, el Suzuki S-Cross S3 con tracción total, un modelo que tal vez no sea el más interesante por su precio, pero que nos permite probar todo lo que puede ofrecer esta gama de Suzuki. Desde luego, salvo que vayas a usarlo tirando de un remolque o a sacar partido fuera del asfalto o por zonas con lluvia y nieve frecuentes, lo mejor es ahorrarse la tracción total. No sólo porque añade un buen pico a la factura de compra, también porque es más cara de mantener y consume más gasolina.

Durante esta semana de pruebas y casi 2.000 km, el Suzuki S-Cross ha dejado claro que tiene una buena relación precio/producto, que es práctico y versátil y fácil de conducir, aunque no todo ha sido miel sobre hojuelas.

¿Es mejor el Suzuki S-Cross que sus rivales?

Si buscamos en el mercado coches de menos de 4,5 metros que ofrezcan el espacio interior de este Suzuki S-Cross, su equipamiento y la tracción total, los candidatos superan ampliamente la barrera de los 35.000 euros que cuesta nuestro protagonista en números redondos. Como principales rivales tenemos a modelos como el Fiat 50ox (al que el Suzuki supera claramente en amplitud interior), el Renault Captur o el Honda HR-V, que se desmarca por precio y no dispone de tracción total pese a ello.

Frente al Renault Captur, el Suzuki cuenta con ventajas como una mayor simplicidad mecánica que hace que las averías sean estadísticamente menos probables y la tracción total. Sin embargo, el Renault tiene un diseño más fresco y un sistema híbrido que consigue muy buenos consumos en ciudad.

Respecto al Fiat 500x, el italiano tiene un diseño más juvenil y atractivo, pero es menos espacioso dentro y sale más caro a igualdad de equipamiento, salvo ofertas puntuales.

Contra el Japonés de Honda, el Suzuki tiene una mejor relación precio/producto y la posibilidad de contar con tracción total, pero el Honda es un modelo más novedoso y con un diseño más atractivo.

Nuestra valoración: 7,0

Diseño 7

Motor 7

Comportamiento 7

Interior 7

Equipamiento 7

Consumos 7

Destacable

  • Relación precio/producto
  • Amplitud interior
  • Buen comportamiento

Mejorable

  • Cinturón central trasero
  • Postura muy elevada
  • Precio de la tracción total

Diseño: Sin florituras

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Estéticamente el S-Cross se ha sometido a un lavado de cara en el que ha mejorado mucho su imagen, al menos a primera vista. Sin embargo, sus proporciones y sus líneas maestras no han cambiado y ya resultaban sobrias hace casi 5 años, así que uno de los puntos menos favorecedores del S-Cross es precisamente que su diseño es algo soso, y por muy bueno que sea un coche, el principal factor para decidir de un comprador pese a la que está cayendo, sigue siendo el diseño, por encima de temas más prácticos.

El frontal es lo que más y mejor se ha actualizado, con unos nuevos faros full led que son muy grandes y ofrecen una iluminación correcta. En la vista lateral es donde menos cambios hay, con unas proporciones muy cúbicas que favorecen un buen aprovechamiento del espacio.

Las llantas de 17 pulgadas con neumáticos 215/45-17 tienen un diseño atractivo, pero a todas luces son excesivas para un coche de este tamaño, peso y prestaciones.

Los acabados y ajustes son buenos y las puertas abren un buen ángulo, lo que deja un cómodo acceso al interior.

En la vista trasera del Suzuki S-Cross de nuevo son las luces lo más llamativo, con unos grandes grupos ópticos que es una lástima que no se vean nada desde el lateral. El portón es amplio y deja un acceso muy cómodo también al maletero.

Sin duda es un coche práctico, bien pensado y más servicial que atractivo.

Interior: Práctico y bien aprovechado

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Al abrir las puerta del S-Cross tenemos un interior más atractivo que el exterior y muy bien aprovechado. Las plazas traseras son muy amplias para un coche de 4,3 metros y también tiene un buen maletero de 430 litros (muy aprovechables por sus formas tan cúbicas), que se puede ampliar abatiendo los respaldos traseros por partes asimétricas y con espacio para una rueda de repuesto.

El salpicadero tiene un buen diseño. Hay detalles algo anacrónicos en estos tiempos, como el cuadro de instrumentos analógico, pero lo cierto es que se lee mejor que la mayoría de los digitales que hay.

Los pasajeros delanteros van muy cómodos, con unos asientos que permiten una buena postura y, aunque algo cortos de banqueta, confortables.

Las plazas traseras tienen bastante espacio para las piernas y también son confortables, pero el cinturón de la plaza central es muy incómodo, al venir desde el techo anclado al montante trasero izquierdo.

Los ajustes son correctos y los plásticos, aunque tienen un aspecto poco cuidado, la realidad es que son de mejor calidad que la media del segmento.

Motor: No necesitas más

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El corazón que mueve este Suzuki S-Cross es un motor de gasolina de 4 cilindos de 1,4 litros de cubicaje y sobrealimentado que entrega 129 CV y 235 Nm de par y que transmite esa potencia al suelo a través de una caja de cambios automática de 6 marchas y un sistema de tracción total AWD del que hablaré luego. Este motor está asistido por un sistema de microhibridación de 48 voltios. Este sistema cambia el alternador tradicional por una máquina eléctrica reversible que puede comportarse como un generador cuando levantamos el pie del acelerador (y aprovechar así la energía cinética al retener) o hay un elevado consumo eléctrico o bien como un motor eléctrico de 10 CV que da un empujoncito al motor de gasolina en las fases en las que más consumo, es decir, en los arranques y al acelerar.

Esta máquina (que se llama BSG o ISG, que significa básicamente arrancador/generador integrado) produce energía eléctrica y la almacena en una batería adicional de 48 voltios que es la que aporta la energía luego en las fases de arranque y/o aceleración.

En cuanto al sistema de tracción total, el Suzuki S-Cross básicamente es un coche de tracción delantera en el que se acopla el eje trasero cuando el sistema determina que hay pérdidas de tracción en el delantero. El sistema es rápido adaptándose y ahorra bastante consumo al evitar arrastres permanentemente.

En la consola central hay una ruleta que nos permite elegir entre 4 funciones:

  • Lock: este modo bloquea el embrague que envía par al eje trasero, como si fuese un diferencial central bloqueable.
  • Snow: adapta la respuesta del cambio, el pedal del acelerador y el sistema de tracción para circular sobre superficies deslizantes.
  • Sport: busca las máximas prestaciones, modificando la respuesta del cambio, del acelerador y del sistema de control de tracción.
  • Auto: se adapta a nuestra forma de conducir y a las condiciones de adherencia.

Comportamiento: Fácil y noble

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Una de las cosas que más me ha gustado de este Suzuki es que se siente ligero cuando lo conduces. La dirección tiene buen tacto y se nota que no es un coche pesado. Este le permite tener unas suspensiones suaves y confortables sin que eso repercuta en un excesivo balanceo de la carrocería.

En ciudad es fácil de llevar porque sus dimensiones son compactas, maniobra bien y, además, al ser muy cuadrado, se perciben bien las esquinas de la carrocería. La caja de cambios automática termina de hacernos mucho más fácil el día a día y el sistema de 48 voltios hace que los arranques y paradas del start & stop sean más eficientes.

En carreteras secundarias es más ágil de lo que su apariencia nos pueda hacer creer, de nuevo se agradece esa sensación de ligereza. La potencia disponible permite adelantamientos seguros y coronar los puertos con solvencia, aunque vayamos cargados. Las curvas las enlaza bien, sus reacciones son nobles y los frenos tienen buen tacto.

En autopista y autovía permite viajar con desahogo. En curvas rápidas transmite confianza y lo más criticable es la insonorización, que permite pasar mucho ruido de rodadura y aerodinámico.

Fuera del asfalto el sistema de tracción total es eficaz y reacciona rápido. No es un 4×4, pero permite más aventuras de lo que parece, siempre que seamos sensatos y tengamos en cuenta la altura a la que están los faldones, si no queremos arrancar de cuajo el parachoques en una zanja.

En definitiva, es un coche con un buen comportamiento, de reacciones seguras y fácil de conducir.

Equipamiento: Sin queja

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El S3 es el tope de gama y con la versión de tracción total la broma se nos va hasta casi 35.000 euros. Puede parecer mucho dinero, pero un VW Taigo cuesta lo mismo, no tiene tracción total y no es mejor coche que éste, además de tener mucho menos habitabilidad.

En la ficha técnica adjunta puedes ver el equipamiento detallado y los extras con su precio. Como ves, no está nada mal su dotación de serie, con un buen número de asistentes avanzados a la conducción (ADAS) como el asistente de mantenimiento en el carril, alerta de colisión con frenado de emergencia, cámaras de visión periférica, control de crucero adaptativo…. No está mal.

En materia de confort tenemos un climatizador automático de doble zona que es una pena que no tenga salidas de aireación independientes para las plazas traseras, techo panorámico, asientos en símil piel y textil con regulación en altura, llave inteligente manos libres, etc.

La conectividad también está en niveles razonables. El sistema multimedia cuenta con Apple Car Play y Android Auto, tomas USB, navegador integrado… no es el sistema más avanzado del mercado, pero cumple.

Consumo: Bien aprovechado

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Los consumos del Suzuki S-Cross no están mal para un coche que tiene que arrastrar la tracción total y con una aerodinámica que no es nada del otro mundo. Aunque no ha cumplido con los valores oficiales, no se ha alejado demasiado.

En concreto, los consumos reales del Suzuki S-Cross 4WD medidos durante la prueba han sido:

  • Ciudad: 7,4 l/100 km
  • Carretera: 5,7 l/100 km
  • Autopista: 6,5 l/100 km

Con estos consumos y un depósito de gasolina de47 litros, con el Suzuki S-Cross es fácil conseguir autonomías en el orden de los 650 km.

Rivales: Rivales del Suzuki S-Cross AWD 2022

Vehículo Suzuki S-Cross 1.4L Mild Hybrid S2 4WD Fiat 500X 1.5 Hybrid Club DDCT Renault Captur E-TECH Híbrido Zen 105kW Honda HR-V 1.5 i-MMD Advance
Precio Desde
31.463 €
Desde
29.100 €
Desde
29.699 €
Desde
34.960 €
Combustible Gasolina Gasolina Híbrido Híbrido
Cambio 6 marchas 7 marchas 4 marchas 1 marchas
Potencia (CV) 129 130 145 131
Aceleración 0-100 km/h (s) 10,2 9,4 10,6 10,7
Consumo Medio (l/100 km)
Emisiones CO2 (g/km)

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