Peugeot presenta un nuevo lanzamiento para el que está siendo un 2024 de lo más completo: el Peugeot E-5008 ve la luz como un SUV eléctrico más polivalente que el 3008, al que calca en prácticamente en todo salvo en su mayor capacidad interior.
Basta un vistazo para darse cuenta del parentesco entre ambos modelos, puesto que el frontal es idéntico, siguiendo la línea de diseño de la marca francesa, que cada vez es más atrevida gracias al conjunto que forman los faros LED con las tres garras diurnas y la parrilla.
A acoger esa última bancada no solo ayuda el mayor tamaño, también lo hace el formato de la carrocería, que abandona la caída de techo de estilo coupé para presentar un corte más convencional, que otorga un mayor espacio para las cabezas de los ocupantes traseros y para el maletero.
Salvo por la configuración de asientos, el formato del habitáculo es idéntico al del 3008. El protagonismo recae sobre la versión evolucionada del i-Cockpit, con una pantalla curvada de 21 pulgadas situada por encima del volante de dimensiones reducidas y con los i-Toggles en otra pantalla situada en posición central.
De su hermano también toma prestada la gama mecánica, conformada por tres versiones eléctricas y una microhíbrida.
Las cero emisiones son dos variantes de tracción delantera, con 214 y 231 CV, ambas con 345 Nm de par máximo y alimentadas por una batería de 73 kWh de capacidad; y una de tracción integral, que alcanza los 320 CV y se nutre de una pila de mayor tamaño, 98 kWh. El resultado es, en el mejor de los casos, un alcance de hasta 660 km, pero la marca no ha concretado los datos de cada variante.
Si es común a todas ellas la carga lenta con hasta 22 kW en corriente alterna (CA) y la rápida en corriente continua (CC) a 160 kW, logrando pasar del 20 al 80% en media hora.
Por último, el microhíbrido de 136 CV será, al menos en principio, la única motorización térmica del modelo.
