El 26 de julio de 2024, París se convertirá en la capital mundial del deporte y la ciudad francesa aprovechará los Juegos Olímpicos para mostrar su apuesta por la movilidad sostenible. No en vano, desde los espectadores hasta los propios deportistas, pasando por los trabajadores, podrán desplazarse con el mínimo impacto sobre el medio ambiente. Un plan, eso sí, que tiene un punto débil.
Como socio internacional de movilidad del Comité Olímpico Internacional y el Comité Paralímpico Internacional, Toyota suministrará una flota de turismos compuesta por más de 2.650 vehículos electrificados y 700 sistemas eléctricos de movilidad de último tramo.
Centrando el foco en los modelos con pila de combustible, Toyota suministrará 500 unidades del Mirai para que la familia olímpica y paralímpica (deportistas, organizadores y voluntarios) pueda desplazarse sin emisiones. Tras los JJOO, los vehículos se sumarán a la flota existente de taxis de hidrógeno parisinos, sumando un total de 1.500 coches de este tipo.
Cabe destacar que París es la ciudad del mundo con más taxis de hidrógeno: este verano sumarán 1.500 unidades de las 17.000 que prestan este servicio en sus calles. A ellos se une la decena de autobuses con el mismo esquema mecánico.
50 repostajes al día
El problema de los Toyota Mirai llegará con la práctica. De momento, sólo pueden recurrir a una hidrogenera en el centro de la capital francesa, situada en el Puente del Alma. Air Liquide, el buque insignia del sector del hidrógeno en Francia, está renovando sus estaciones y esta es una de las que ha puesto a punto recientemente.
Esta instalación se inauguró en 2015 con motivo de la COP21 y su ubicación la convertirá en la base para los taxis de hidrógeno que tendrán más actividad que nunca con motivo de los Juegos Olímpicos. Sin embargo, esta estación sólo es capaz de proporcionar alrededor de 150 kilos de hidrógeno al día. O lo que es lo mismo: unos 50 repostajes… para 500 taxis.
La hidrogenera más grande de Europa
La cifra se antoja escasa para toda esa flota de Toyota Mirai que dará servicio a los presentes en París con motivo de los Juegos. Por ahora, la única solución pasa por recurrir al resto de estaciones de hidrógeno (nueve) que hay en la zona periurbana de la ciudad.
En este sentido, todo apunta a que será la hidrogenera de Hysetco, situada en la Porte de Saint-Cloud, la que elijan todos aquellos que no puedan repostar en la del Puente del Alma. Es la estación más grande de Europa: está equipada con seis bombas y puede surtir hasta una tonelada de hidrógeno por día, es decir, 250 repostajes.
