Estrenará la hibridación este verano
El próximo paso que dará el mítico Porsche 911 en su correspondiente actualización del 992, será la adopción de la hibridación, tras 60 años fiel al desarrollo de sus motores deportivos de 6 cilindros opuestos.
Como hacer de la necesidad virtud parece ser últimamente norma obligada, Porsche aprovechará el “restyling” de su último 911 presentado en 2019 con una nueva versión del 911 Turbo hibridada con un motor eléctrico por debajo del depósito de combustible, seguramente también bajo la hibridación enchufables (PHEV) aunque todavía no hay nada confirmado De momento, la marca anuncia una hibridación ligera a 48 voltios (MHEV). Dicha hibridación se aprovechará para mejorar aún más el rendimiento del 6 cilindros “bóxer” biturbo de 3,8 litros, hasta obtener una potencia final conjunta en torno a los 700 CV.
El motor de gasolina proporciona tracción a las ruedas traseras, mientras que el motor eléctrico impulsará las ruedas delanteras a través de un motor de arranque integrado de 48 V en la caja de cambios automática de doble embrague. La energía eléctrica se almacena en una batería ligera de iones de litio especialmente desarrollada, configurada específicamente para propiedades de carga y descarga rápida de energía.
Además, antes de que el 911 de octava generación desaparezca a finales de esta década, Porsche también lanzará un sucesor híbrido de más de 800 CV del temible GT2 RS. El nuevo tren motriz se ha desarrollado mediante una transferencia de tecnología entre las divisiones de automóviles de producción y deportes de motor de Porsche, en combinación con Rimac, el especialista croata en propulsión eléctrica en el que Porsche tiene una participación del 45%.