Cualquier accidente de un coche duele a un amante del motor, desde una “rascada” hasta un siniestro, sin importar además qué automóvil en cuestión sea. Eso sí, en función del modelo y del percance, nos llevamos más o menos las manos a la cabeza. El que os traemos hoy es un caso que duele se mire por donde se mire: un Porsche 911 GT3 RS nuevo sumergido en un río.
Dado que hay imágenes del bólido fuera del agua, una vez recuperado, se pueden apreciar varios detalles. El primero es que tiene todo el frontal destrozado, algo que no se sabe si ocurrió en un choque previo a la entrada en el agua (lo más probable) o una vez ya en el rio.
El accidente debió ser muy aparatoso, pero por suerte el piloto salió prácticamente ileso, pues aparentemente solo recibió un golpe en la cabeza, pero se encontraba bien.
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A todas luces es una tragedia, y es que el deportivo de 525 CV, que es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,2 segundos y de alcanzar una velocidad máxima de 296 km/h, cuesta la friolera de 286.470 euros (en España), así que el desembolso para reemplazarlo va a ser mayúsculo.