Adelantar a un coche en el que el conductor o conductora está durmiendo puede parecer una imagen futurista, pero es algo que varias personas han presenciado en primera persona, tanto en Europa como en Estados Unidos. El último en rendirse a los encantos de Morfeo ni se dio cuenta de que la policía le perseguía.
La conducción autónoma tiene cinco niveles y el Autopilot de Tesla está en el tercero. El automovilista puede dejar de prestar atención a la conducción, aunque no olvidarse de ella completamente, puesto que deberá intervenir cuando la situación lo requiera.
Dormido al volante durante 40 kilómetros
Su Tesla Model X de 2019 circulaba por la autopista E4 cuando a otro conductor le llamó la atención que, estando en el carril rápido, iba despacio y no tenía intención de adelantar a otros coches. Al rebasarlo, comprobó que el hombre que iba al volante estaba dormido.
Decidió llamar a las autoridades, que iniciaron la persecución. Desde el aviso hasta que el coche de la policía llegó a la carretera, el Tesla Model X había recorrido unos 20 kilómetros.
A lo largo de otros 20 kilómetros y sin éxito alguno, los agentes intentaron despertarle para darle el alto. Tuvieron que dejar pasar un par de salidas de la autopista hasta que el conductor abrió los ojos: fue entonces cuando giró repentinamente a la derecha y casi choca contra el coche de la policía.
Finalmente, se detuvo en una estación de servicio. Su primera reacción pasó por intentar convencer a los agentes de que no había cerrado los ojos, pero terminó reconociendo que se había quedado dormido al volante porque no había descansado bien la noche anterior. Le multaron por conducción imprudente.
Una imagen que se repite
Esta situación no es novedosa. Hace un par de años, en Ontario (Canadá), el conductor de un Tesla fue captado durmiendo a bordo de su coche eléctrico, que iba a más de 100 km/h. Meses después la escena se repitió en Alemania, pero a 110 km/h.
En 2023, ocurrió algo parecido en la Autopista 15 de California (Estados Unidos). Una mujer activó el Autopilot de su Tesla y se quedó dormida. Lo mismo hizo un hombre en Miami, que, además de reclinar el asiento, usó la ventanilla como reposacabezas.
