Escocia es el lugar elegido por MINI para poner a prueba en todo tipo de situaciones a la nueva generación del MINI Countryman, que ultima su fase de puesta a punto antes de su llegada al mercado este mismo año.
Más aventurero que nunca. Así plantea MINI la nueva generación del MINI Countryman, un SUV que ganará en capacidades 4×4 para permitir a sus propietarios «escapar de la vida cotidiana». Y para demostrar que la cosa va en serio, MINI ha desvelado las primeras imágenes de los prototipos de prueba camuflados evolucionando por todo tipo de superficies en las Tierras Altas de Escocia, desde vadeos a fuertes pendientes, zonas de rocas o barro.
Por ejemplo, que seguirá siendo el MINI más grande e incluso crecerá en tamaño, para colocarse cerca de los 4,5 metros de longitud y competir así directamente con coches como el Audi Q3, el mismísimo BMW X1 o el CUPRA Formentor. También parece claro que de salida contará con motores de combustión, tanto gasolina como diésel, con sistema de hibridación ligera de 48 voltios. Desaparecerá la versión MINI Countryman PHEV, que se fue en el primer híbrido enchufable de la marca. Y habrá dos versiones de propulsión cien por cien eléctrica, una con un único motor de 190 CV y batería de 54 kWh, y otra con dos motores, tracción total y más de 300 CV, con una batería que alcanzará los 64 kWh de capacidad.