El fabricante coreano comercializa en nuestro país un interesante monovolumen con motor turbodiésel de 177 CV.
En algunas ocasiones, los fabricantes de automóviles nos demuestran que siempre hay margen para la sorpresa. En un mercado en el que cualquier cosa que no lleve el apellido SUV casi ni se contempla por parte del público, Hyundai ha querido arriesgar y no solo en el apartado estético. Después de comercializarlo en otros mercados, ahora, el Staria llega a nuestro país, como un soplo de aire fresco. Un monovolumen familiar en el más amplio sentido del término.
No es un vehículo para la inmensa mayoría de clientes. Al contrario, hablamos de un automóvil enfocado a un nicho de mercado muy concreto, que vivió sus años de esplendor hace décadas, pero que sigue siendo objeto de deseo para esas familias numerosas que necesitan mucho espacio y plazas cómodas para transportar a todos sus miembros.
Galería: Hyundai Staria 2022, presentación nacional
En el primer caso, no cabe ninguna duda de la solvencia del Staria, ya que anuncia una longitud de 5,25 metros, de los cuales, 3,27 son de distancia entre ejes, lo que nos da una primera idea del espacio interior disponible. La anchura alcanza los 2,0 metros, por 1,99 de altura, datos que refuerzan la imponente envergadura del vehículo coreano.
Respecto a la motorización, debemos decir que el cliente solo podrá disfrutar de una variante, concretamente, un propulsor turbodiésel de cuatro cilindros y 2,2 litros de cilindrada, que desarrolla una potencia de 177 CV y un par motor de 431 Nm.
Hemos tenido ocasión de conducir el Staria por tierras gallegas, concretamente, la versión de dos ruedas motrices y acabado Maxx. Desde el primer momento, hemos podido disfrutar de un nivel de comodidad sobresaliente, tanto por espacio interior, como por tarado de la suspensión, enfocada con claridad a tal fin.
El motor empuja con suficiencia desde bajas revoluciones y los 431 Nm de par motor disponibles hacen que el Staria pueda parecer, incluso, un vehículo más pequeño y ligero de lo que es. En carreteras amplias y bien asfaltadas, el modelo coreano pisa con mucho aplomo y la dirección ofrece un perfecto guiado del eje delantero.
Solo al adentrarnos en la ciudad, apreciaremos ciertas limitaciones, a la hora de girar por esas calles más estrechas o aparcar en las plazas de aparcamiento más angostas.
En el uso cotidiano, aunque anuncia un consumo medio de carburante de 8,2 litros cada 100 kilómetros, en nuestro recorrido nos hemos movido en cifras que rondaban los 9,0 litros, algo que parece más que razonable, para un vehículo de este tamaño, con un peso de 2,1 toneladas y con una altura de casi 2,0 metros.
Otro aspecto que puede resultar determinante para muchos clientes es que el habitáculo es un espacio muy iluminado, con una buena dosis de zona acristalada, lo que refuerza ese ambiente agradable. Los pasajeros de la segunda fila disponen de un módulo de control digital de la temperatura, lo que asegura una perfecta climatización interior. En definitiva, viajar durante trayectos de largo recorrido a bordo del Staria es un disfrute.
Al margen de los datos técnicos, puede que lo que más llame la atención sea el diseño exterior del Staria, con un frontal de corte futurista, que sigue la senda marcada por el Tucson y los modelos más recientes de Hyundai. La parrilla ubicada en la parte baja del frontal y las ópticas principales de diodos luminosos completan un aspecto vanguardista, que no deja indiferente a nadie.
El habitáculo, como te puedes imaginar, sigue esa línea innovadora presente en el exterior. Hay mucho espacio, numerosos huecos portaobjetos de buen tamaño, así como varios puertos USB, para la conexión de dispositivos portátiles, como smartphone y tabletas. Las versiones más equipadas ofrecen asientos de tipo ejecutivo, de gran calidad y comodidad.
Tampoco podemos pasar por alto la presencia de detalles destacados como la instrumentación digital (10,25 pulgadas) o la pantalla del sistema de infoentretenimiento con el mismo tamaño y dispuesta en posición flotante sobre el salpicadero, en línea con el aspecto futurista del exterior. Las versiones más equipadas pueden disponer de esos asientos ejecutivos, en disposición 2+2+3, que convierten al Staria en un monovolumen de primera clase.
En materia de seguridad, varios son los elementos a destacar, reunidos todos bajo el paraguas Hyundai SmartSense, que engloba, por ejemplo, el control de crucero inteligente con función de curvas basado en el navegador, el asistente de mantenimiento de carril, el sistema anticolisión frontal con detección de peatones, el sistema de alerta de ángulo muerto o el de advertencia por tráfico cruzado trasero.
Todo, sin olvidarnos de otros aspectos en materia tecnológica, como los protocolos Apple CarPlay y Android Auto inalámbricos, el sistema de carga por inducción para el teléfono móvil, el equipo de sonido premium Bose con 12 altavoces o todos los servicios conectados asociados al denominado sistema Hyundai BlueLink, que nos proporciona información sobre geolocalización, gestión de rutas de navegación en modo online, información sobre gasolineras y precios actualizados, así como el reconocimiento vocal en línea.
En definitiva, un vehículo moderno, llamativo, práctico y enfocado a esas familias numerosas necesitadas de espacio y calidad, por un precio más que razonable. La gama se estructura en torno a tres acabados: Tecno, Maxx y Style, con unos precios que parten de los 52.990 euros (Tecno), 54.990 euros (Maxx) y llegan a los 62.990 euros (Style).
