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Prueba BMW M4 Competition xDrive Cabrio: ¡un bello coche... muy bestia!

El Serie 4 descapotable más potente que puedes adquirir es un coche que impone en todos los sentidos.

prueba bmw m4 competition xdrive cabrio: ¡un bello coche... muy bestia!

Estamos inmersos en el periodo navideño y en estas fechas una sensación de buenos presagios nos suele invadir. Bien sea porque seamos alguno de los afortunados a los que la lotería de Navidad les ha dado una alegría o bien, porque soñar es ‘gratis’, a final de año siempre es un buen momento para dejar volar nuestra imaginación con uno de esos coches al alcance de unos pocos.

En este caso, hablamos del BMW M4 Competition Cabrio, la versión más potente y exclusiva que puedes adquirir del descapotable alemán. Su carta de presentación es irreprochable. 510 CV de potencia, tracción total xDrive, 3,7 segundos en el 0-100 km/h y una velocidad punta limitada electrónicamente a 250 km/h (280 km/h de forma opcional). ¿Precio? desde 135.600 euros, pero eso no es determinante… por ahora.

El BMW M4 Competition xDrive Cabrio, en cinco puntos clave

Galería: BMW M4 Competition Cabrio 2023

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Diseño

El sucesor del M4 Cabrio es un vehículo que llama la atención allá por donde pasa. Bien sea por el color verde M Isle of Man green metallic (1.336 euros) o por las llantas de aleación de 19 pulgadas (delante) y 20 pulgadas (detrás) M de radios dobles (1.214 euros), o por el espectacular paquete M Race Track, que incluye los asientos envolventes en fibra de carbono, el BMW Live Cockpit Professional, los frenos M carboderámicos, el M Drive Professional o el paquete exterior M de fibra de carbono (21.080 euros), este M4 Cabrio no deja indiferente a nadie.

El descapotable alemán es un vehículo esbelto y proporcionado, ya que a pesar de los 4,79 metros de longitud que anuncia la ficha técnica, su silueta parece más compacta y bien resuelta de lo que dicen los números.

En cualquier caso, la distancia entre ejes, de 2,86 metros, parecen un espacio más que adecuado para transportar a los cuatro ocupantes que puede montar en su interior. Aquellos que necesiten un descapotable con más espacio o más comodidad, cualquier otro Serie 4 Cabrio cumplirán esa función, pero el M4 Cabrio asegura otro tipo de ‘virtudes’.

Hablamos de un descapotable de corte clásico, y eso se traduce en que equipa una capota de lona que, en nuestro caso, luce el acabado con efecto plata sobre fondo antracita (383 euros). El resto de elementos son reconocibles en el resto de la gama del Serie 4 Cabrio… salvo las cuatro salidas de escape ubicadas en el difusor trasero, que dejan claro que estamos ante un miembro de la familia M de BMW.

Interior

Acabamos de mencionar el hecho de que esta unidad equipa el paquete M Race Track y eso es fundamental para valorar la atmósfera que se respira en el interior de este BMW. Los asientos de tipo bacquet envuelven el cuerpo a la perfección (eso no significa que sean los más cómodos, ojo), el cuadro de instrumentos digital puede transformarse en un display de carreras llegado el caso y las molduras de fibra de carbono aportan ese toque ‘racing’, pero sin abusar, que todo buen deportivo de calle necesita.

A pesar de ser un ‘M’ en mayúsculas, el M4 Competition xDrive Cabrio sigue manteniendo elementos ‘racionales’ para el disfrute diario, como la ruleta central iDrive, que nos adentra en un mundo de posibilidades de personalización, ya sea en términos de confort, como multimedia o de prestaciones.

Puestos a mejorar, nos gustaría un sistema multimedia algo más simplificado y racional, ya que los múltiples submenús que podemos visualizar a través de la pantalla central táctil de 14,9 pulgadas. Esperemos que en próximas actualizaciones del sistema se tengan en cuenta estos aspectos.

En cualquier caso, los BMW M suelen ‘paliar’ este contratiempo con la inclusión de los pulsadores ‘M1′ y M2’, en color rojo, ubicados en el volante multifunción y que agrupan una serie de funciones según sean nuestras preferencias. De esta forma, con pulsar uno de estos dos botones, configuraremos nuestro ‘set-up’ particular en solo un instante.

Detrás, las dos plazas disponibles sirven para un uso esporádico, ya que ni por diseño ni por espacio son recomendables para largos trayectos. El M4 Cabrio es uno de esos vehículo que requiere de una atención ‘personal’ o como mucho, en pareja.

Respecto al maletero, diremos que oscila entre los 300 y los 385 litros, según tengamos la capota recogida o desplegada, lo que parecen valores razonables para dar servicio a cuatro personas. Eso sí, huye de las maletas voluminosas, ya que la boca de carga no es demasiado amplia.

Mecánica

Para seros totalmente sinceros, todavía me cuesta hablar de un BMW M sin hacer referencia a un bloque de ocho cilindros. Atrás quedaron esos gloriosos años (por no hablar del motor V10), y ahora manda la eficiencia energética, que ha llevado a BMW a optar por un bloque de seis cilindros en línea, 3,0 litros y doble turbobocompresor, que entrega 510 CV de potencia a 6.250 vueltas y 650 Nm de par motor entre 2.750 y 5.500 rpm. Como bien puedes comprender, son cifras muy respetables y que obligan a un nivel elevado de conducción, por encima de la media, si quieres intuir los límites del vehículo (algo que no te recomendamos hacer en carreteras abiertas al tráfico).

Ese enorme potencial está gestionado por la transmisión automática con convertidor de par Steptronic, con ocho velocidades, y la tracción total xDrive, que hacen que este M4 Competition xDrive Cabrio sea un vehículo más asequible (ojo, no digo que fácil) de conducir que otros M3 o M4 previos.

Las prestaciones son sobresalientes y marca 3,7 segundos en la aceleración de 0 a 100 km/h, registrando una velocidad máxima autolimitada a 250 km/h. En nuestro caso, llega a los 280 km/h ya que esta unidad equipa el paquete opcional BMW M Driver.

En términos de consumo, el descapotable alemán anuncia 10,2 litros cada 100 km, de forma oficial; sin embargo, en condiciones de uso habitual, por todo tipo de trazados, lo normal es moverse entre 10,9 y 12 litros. La capacidad del depósito de combustible es de 59 litros, una cifra que no está mal, pero que te obligará a parar con cierta frecuencia si viajas con ‘alegría’.

En marcha

Llegamos al apartado más difícil de explicar con palabras, porque el BMW M4 Competition xDrive Cabrio está pensado para ser disfrutado en todos los sentidos. El placer que son capaces de transmitir estos vehículos en marcha no es equiparable a ningún otro turismo, por exclusivo que sea.

Quizás, el único ‘sentido’ del que no disfrutamos con plenitud sea el del oido, ya que la melodía que emana de las cuatro colas de escape no termina de emocionar, como lo habría un propulsor con dos cilindros más, por ejemplo. Eso sí, cuando se requiere, el motor de seis cilindros es capaz de ‘bramar’ de forma apreciable.

El puesto de conducción tiene sus peculiaridades. Los asientos me han gustado… aunque no me los compraría en la vida. El diseño llega a ‘recoger’ la espalda y las piernas de forma eficaz… pero poco confortable. Dada mi corpulencia, he sido incapaz de sentirme a gusto una vez sentado, pero eso no me impide destacar unos asientos que, para un piloto más bajo y estilizado, resultarán como ir sentados en un coche de carreras.

La dotación de serie es variada y contundente, destacando el diferencial deportivo M, la dirección asistida M Servotronic, la suspensión adaptativa M Sport o el tacto y puesta a punto de los frenos, en nuestro caso, los carbocerámicos incluidos en el paquete M Race Track, que dicho sea de paso, es el complemento perfecto para un vehículo sobresaliente por muchos motivos.

Ni de lejos creas que puedes exprimir al máximo las capacidades de un BMW M4 Cabrio en vías públicas. Solo en un circuito y con la supervisión de algún experto piloto podrás entender la dimensión dinámica de este descapotable. Y no creas que por tener un sistema de tracción total, puedes confiarte. Es cierto que disponer de tracción a las cuatro ruedas es un plus en términos de seguridad, pero eso no puede hacer que te confíes o que creas que es tu ‘ángel de la guarda’ particular.

Aunque ya lo habrás imaginado, el M4 Cabrio es un vehículo ágil, que cambia de trayectoria con una solvencia pasmosa gracias, en gran parte, a una dirección asistida muy eficaz y a un chasis con una puesta a punto magnífica. Sin duda, la capacidad de tracción es muy significativa y el paso por curva puede efectuarse a una velocidad muy alta. En definitiva, es un deportivo en mayúsculas, con el que disfrutar de todos los aspectos de la conducción.

¿Todo es ideal? Bueno, todo no. Entre los aspectos a mejorar, la capota textil, a pesar de las numerosas capas de aislamiento que alberga en su interior, no consigue proteger a los ocupantes al 100% de la rumorosidad exterior y eso, según el tipo de cliente, puede llegar a ser un handicap, sobre todo, en climas más fríos y lluviosos. En ese caso, al elección es clara: BMW M4 Coupé.

Equipamiento y precio

Como deportivo exclusivo que es, el BMW M4 Competition xDrive Cabrio es un coche al alcance de un público selecto. Los 135.600 euros de partida son una cantidad que la mayoría de clientes, a buen seguro, superarán. Solo tienen que recurrir al extenso catálogo de extras disponibles, para ‘confeccionar’ una unidad aún más costosa y exclusiva. Eso sí, en un mundo ideal, en el que tuviéramos un cheque en blanco para configurar nuestra unidad soñada sin importar el coste, el paquete M Race Track estaría sí o sí, además de los faros BMW Láser, para reforzar la seguridad en conducción nocturna.

El resto de extras serían discutibles, aunque no imprescindibles, por mi parte. Eso sí, cuidado con los extras que deseas, porque si añades más de la cuenta, la tarifa se aproximaría, peligrosamente, a los 200.000 euros y ese precio se aproxima mucho a todo un BMW M8 Competition Cabrio y sus 625 CV de potencia.

BMW M4 Competition xDrive Cabrio 2023

  • Motor: Gasolina, 6 cilindros en línea, turboalimentado, 2.993 cm³
  • Potencia: 510 CV a 6.250 Nm
  • Par máximo: 650 Nm entre 2.750 y 5.500 rpm
  • Caja de cambios: Automática de convertidor de par, 8 velocidades
  • 0-100 km/h: 3,7 s
  • Velocidad máxima: 250 km/h
  • Consumo: 10,2 l/100 km
  • Tracción: Total xDrive
  • Longitud: 4,79 m
  • Anchura: 1,89 m
  • Altura: 1,39 m
  • Peso en vacío: 1.920 kg
  • Número de asientos: 4
  • Capacidad del maletero: Entre 300 y 385 l
  • Precio base: 135.600 euros

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