Sí, sabemos que la tendencia de hoy en día es minimizar el tamaño de los motores y poco a poco electrificar los autos. Pero hubo un tiempo en que era todo lo contrario, y BMW apostaba por mecánicas de gran tamaño para sus modelos más importantes.
Hasta hace no mucho, el BMW Serie 7 tenía un motor V12, el M5 E61 un V10, el M3 E92 un V8 y las versiones no deportivas de otros modelos llevaban el clásico 6 cilindros en línea. Pero la firma también experimentó un poco con motores de más cilindros.
Este prototipo recurre a un motor V16.
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Un BMW V16
Su más reciente contribución para los “nerds” de BMW es un Serie 7 de 1990 con motor V16. Claramente es un prototipo del 750 iL, con aspectos que, naturalmente, no corresponden al modelo de producción, como faros o espejos.
Pero eso es irrelevante cuando bajo el cofre está el llamado motor “Goldfisch”, un V16 de 6.6 litros que era (y sigue siendo) algo único. Al día de hoy, solamente Bugatti usa 16 cilindros, aunque en formato de W.
El BMW Serie 7 con motor V16 genera 343 caballos de fuerza que, acoplados a una transmisión automática de 5 velocidades, era capaz de alcanzar 250 km/h. Eso no suena impresionante hoy en día, pero hace 34 años sin duda eran cifras de alto calibre.
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Aunque el motor V16 nunca se llevó a producción, hoy permanece como una joya oculta en la historia de BMW y que, probablemente, quede guardado como una muestra de lo que alguna vez se planteó como el máximo referente de desempeño para la casa bávara.
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