La dupla formada por los Citroën C4 y C4 X cuenta con una oferta mecánica idéntica. Ambos modelos han estado disponibles desde su lanzamiento con versiones de gasolina, diésel y completamente eléctricas; lo que les otorgaba las etiqueta C y Cero de la Dirección General de Tráfico (DGT). Faltaba una alternativa intermedia híbrida que acaba de ponerse a la venta.
La marca francesa ha optado por la vía más sencilla para hacerse con la pegatina ECO, la microhibridación, adoptado un sistema de propulsión MHEV que ya se ha visto en otros modelos pertenecientes a Stellantis, como el Opel Corsa o el Peugeot 208.
Aunque la presencia del apartado de cero emisiones es testimonial, como ocurre en todos los microhíbridos, es beneficioso en términos de eficiencia y emisiones contaminantes.
Respecto a la motorización 130 EAT8, que emplea la misma caja de cambios automática de ocho velocidades, pero es menos potente, consigue un ahorro de combustible de un litro cada 100 kilómetros y reduce las emisiones de CO2 en más de 25 gramos. Así, en ambos casos es un 20% más eficiente.
La adopción de un sistema microhíbrido se plantea como un movimiento lógico para Citroën.
El Citroën C4 Hybrid 136 está disponible desde 24.150 euros y el C4 X Hybrid 136 tiene un precio de partida de 24.600 euros.