Cuando se piensa en coches híbridos rápidamente se apunta a modelos que combinan motores térmicos con apoyo eléctrico, pero en realidad el calificativo de ‘híbrido’ implica que se combinen dos naturalezas distintas, así que hay muchas otras opciones.
Así, los vehículos bifuel, ya usen Gas Licuado Petróleo (GLP) o Gas Natural Comprimido (GNC) también son otro tipo de híbridos. Así, hay margen para innovar en este campo y Honda ha abierto una nueva vía al respecto: un coche híbrido que combine apartado eléctrico con pila de hidrógeno, el Honda CR-V e:FCEV.
Su corazón es un motor eléctrico de 176 CV y 311 Nm de par máximo que va asociado a las ruedas delanteras. Éste se alimenta por una doble vía.
Por un lado dispone de una batería de 17,7 kWh de capacidad que le otorga una autonomía de 47 kilómetros. En un PHEV convencional, una vez pasado ese punto, entraría en acción la parte térmica del sistema, pero en este caso es el tanque de hidrógeno, de 4,3 kilos de capacidad, el que empieza a suministrar la energía, consiguiendo una autonomía total de 435 kilómetros.
Las ventajas del Honda CR-V e:FCEV
Por un lado, solventa la tan habitual práctica que llevan a cabo muchos usuarios de este tipo de vehículos, que circulan con la batería descargada, utilizando solo el motor térmico y, por tanto contaminando igual o más (por el peso adicional) que un modelo de combustión puro.
En un primer momento el Honda CR-V e:FCEV estará disponible únicamente en formato de leasing en California, Estados Unidos, antes de que termine el año. Sin embargo, es posible que la marca utilice esta fase como una prueba para evaluar el interés y sopesar su lanzamiento en otras partes del mundo.