La sexta generación Honda CR-V avanza en eficiencia, sistemas de seguridad activa y estrena en Europa una variante híbrida enchufable con hasta 82 km de autonomía.
El CR-V es Honda y buena parte de los resultados de Honda en España se deben al CR-V, un SUV lanzado en su primera generación a finales del siglo pasado y que se convirtió en uno de los precursores del segmento más popular en nuestros días. De ahí la importancia de la renovación de un coche que alcanza ya su sexta generación y que llegará al mercado en apenas unos meses, antes de finales de este año 2023.
Esta nueva generación Honda CR-V estará disponible exclusivamente con motores de gasolina, lo que no es una novedad, pero sí que además de la versión híbrida verá la luz una variante híbrida enchufable complementaria de la que Honda guarda los detalles más jugosos. Por el momento se sabe que su autonomía cero emisiones será de 82 km en el caso más favorable y que la recarga de su batería se realizará en 2,5 h, lo que nos lleva a especular con una batería en el entorno de los 18 kW de capacidad neta y un cargador a bordo de 7,4 kW. En pocas semanas tendremos la confirmación.
El diseño y dimensiones del nuevo Honda CR-V
El interior del nuevo Honda CR V mantiene un diseño evolutivo, con cierto regusto clásico.
El sistema mecánico del Honda CR-V
Un motor de gasolina de inyección directa, ciclo Atkinson, 2 litros y cuatro cilindros es el corazón de un sistema que evoluciona el híbrido eléctrico presentado hace menos de un año en el Civic. Se emplea indistintamente en la variante híbrida del CR-V y en la híbrida enchufable y también comparten los motores eléctricos que asociados entre sí favorecen tres modos de propulsión: eléctrico, híbrido de combustión. No se han comunicado detalles de potencias, pero a buen seguro no sería descabellado pensar que rondarán los 200 CV de potencia máxima, algo fácilmente alcanzable dado que el actual anuncia 184.
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Se espera un paso adelante en materia de seguridad activa con la incorporación del sistema Honda SENSING 360 de protección omnidireccional que elimina los ángulos muertos alrededor del vehículo y complementa a las funciones actuales en clave de protección de los ocupantes. Será el mejor aliado para evitar colisiones que pongan a prueba el avance anunciado por Honda en cuanto a seguridad pasiva para su nuevo CR-V.