Mazda MX-30 R-EV
Mazda ha confirmado que dejará de comercializar su primer coche eléctrico en Estados Unidos, y todo después de vender apenas 66 unidades en los seis primeros meses del año.
Como era de esperar a la vista de la propuesta desde el punto de vista técnico, las ventas comenzaron lentas, con un solo dígito durante los primeros tres meses del año. Luego, estas aumentaron ligeramente, pero en números extremadamente bajos, con 18 unidades en mayo y 16 en junio.
Este es un movimiento que denota que si una marca no está convencida con la tecnología, y decide sacar un producto simplemente por cumplir desde el punto de vista publicitario y ambiental, este no se venderá.
Y es que estamos en una era donde la competencia es brutal, y donde incluso con una fuerte inversión y decisión, puede no ser suficiente para lograr el éxito.
La idea de Mazda ha sido el de aprovechar el excelente trabajo de la marca en el aspecto estético, y lanzar un SUV compacto que convenciese a los clientes por el valor de marca y el diseño.
Pero el gran hándicap de Mazda ha sido su batería. Un pack de apenas 35,5 kWh de capacidad, que le otorgan una autonomía homologada de 200 km bajo el ciclo europeo WLTP. Y como todos sabemos, una autonomía que en el mundo real es menor, y que en invierno es incluso más baja.
Pero incluso con estos mimbres, el MX-30 podría ser una alternativa para los que busquen algo compacto y sencillo, pero económico. Pero no, el MX-30 no es una alternativa de bajo coste ya que en España arranca en los 38.050 euros en su versión más económica. Esto son 1.940 euros menos que un Tesla Model 3 Standard. Un modelo con el doble de potencia y más del doble de autonomía homologada.
Mazda MX-30 R-EV
Empezando por un motor eléctrico que eleva su potencia hasta los 125 kW (170 CV) que le permiten acelerar hasta los 100 km/h en 6 décimas menos que el modelo eléctrico.
La batería tiene 17,8 kWh de capacidad y el depósito cubica 50 litros. La autonomía en modo eléctrico se sitúa en 85 km WLTP. Cifra que por supuesto, podremos ampliar usando el motor rotativo Wankel de 830 centímetros cúbicos como extensor de autonomía.
En cuanto a la recarga, en alterna llega a un máximo de 11 kW, lo que le permite hacer una carga completa hasta el 100% en 40 minutos, y además puede acceder a los puntos rápidos en corriente continua, con una potencia máxima de 36 kW, que en 25 minutos le llega hasta el 80% de carga. Es interesante señalar que también puede ceder energía a equipos externos, proporcionando hasta 1,5 kW de potencia eléctrica gracias a una toma V2L.
Factores que hacen entre todos que la versión 100% eléctrica pase totalmente desapercibida, y camine como está sucediendo en Estados Unidos a su desaparición anticipada.