Sorprendentemente, no ha sufrido daños, aunque el propietario no puede creer la buena suerte que ha tenido.
El Jeep CJ original era un coche muy difícil de sustituir, pero el Jeep Wrangler YJ aguantó el tipo más que de sobra. Fabricado entre 1986 y 1995, conservó el carácter robusto del Jeep original, pero era más confortable gracias a sus modernas comodidades, además de tener un mejor comportamiento en carretera. Aun así, siguió siendo un vehículo duro y robusto que parece más feliz cuando se embarca en una aventura todoterreno.
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Cómo ocurrió este suceso
El coche que protagoniza esta historia está aparcado delante del garaje en lo que parece una tranquila tarde de verano cuando, de repente, empieza a rodar silenciosamente hacia atrás en un lento arco colina abajo.
Es difícil saber qué hay más allá de los árboles y del Jeep inmovilizado. Además de más árboles, hay un pequeño barranco o posiblemente un estanque. En cualquier caso, el Jeep tuvo suerte de no rodar por esa zona.
Parece como si el Jeep se hubiera encogido de hombros despreocupadamente ante el impacto a baja velocidad como si no fuera gran cosa.
El propietario arranca el Jeep y lo devuelve a su plaza de aparcamiento delante del garaje. Después de volver a comprobar el Jeep para asegurarse de que esta vez no rodará, se aleja, deteniéndose a mirar la ladera antes de perderse de vista. Es casi como si no pudiera creer su suerte o se estuviera imaginando lo mucho peor que podría haber sido el accidente.