- 5 cosas buenas del Renault Espace
- 5 cosas malas del Renault Espace
- Así funciona el Renault Espace
- ¿Cuánto cuesta el Renault Espace?
- ¿Cuánto cuesta este Renault Espace?
La sexta generación del mítico Renault Espace, lanzada en 2023, abandona su concepto monovolumen después de casi 40 años para transformarse en SUV. Eso acarrea algunas cosas malas, claro.
El Renault Espace es el monovolumen por antonomasia. Yo diría que casi todo el mundo lo conoce, también quienes no tienen ni idea de coches. Fue lanzado en 1984 y de algún modo fue culpable de la expansión de los monovolúmenes, fenómeno que abarcó varios segmentos.
5 cosas buenas del Renault Espace
- Es muy cómodo. El confort de marcha permanece casi inalterado en el remasterizado Espace. El trabajo en la suspensión se refleja en un rodar sedoso y aplomado.
- Buenas calidades. Por dentro está bastante bien hecho, hasta el punto de que en este sentido se sitúa más cerca de automóviles premium que generalistas.
- Eficiencia en uso cotidiano. Únicamente se comercializa con una motorización híbrida no echufable que más abajo detallaremos cómo es. En recorrido urbano logra desplazarse durante mucho tiempo en modo eléctrico, llegando a registrar consumos medios que quedan por debajo de los 6,0 L/100 km.
- No hace falta más potencia. El conjunto térmico-híbrido suma 200 CV de potencia trabajando conjuntamente. Para un uso familiar, va más que sobrado, de hecho, se basta de 8,8 segundos para pasar de 0 a 100 km/h.
- No es demasiado caro. La gama arranca en 42.253 euros y la versión más equipada, que es esta, cuesta 46.618 euros. No son cifras desacordes teniendo en cuenta el resultado general que ofrece el vehículo.
5 cosas malas del Renault Espace
- No es un monovolumen, no es un Espace. La idea de alargar un Austral para hacer un coche de índole más familiar, no es mala. Pero a mi modo de ver no deberían haberlo llamado Espace puesto que no tiene nada que ver con sus supuestos ancestros.
- Menos práctico. Un monovolumen es difícil de superar en términos de aprovechamiento del espacio interior, y eso se refleja en el nuevo Espace. Ofrece muy buena altura interior, pero menos anchura que antes y un maletero que se queda en 581 litros en la versión de cinco plazas y en 477 litros en la de siete (y en 159 litros con todas en uso). En la anterior generación eran 680 litros en versiones de cinco plazas y 614 litros en las de siete (247 litros con todas en uso).
- 7 plazas cogidas con pinzas. El acceso a la tercera fila de asientos es complejo y el espacio para las piernas, testimonial. Además, el suelo queda muy alto, lo que obliga a una incómoda flexión de rodillas. Sólo son utilizables por niños pequeños y siempre que se sacrifique espacio en la segunda fila desplazándola hacia delante (lo puede hacer en un máximo de 26 cm).
- Consumo en carretera. Si bien el conjunto híbrido es muy eficiente en ciudad y desplazamientos cotidianos, a la hora de viajar no lo es tanto. A ritmo legal, es muy fácil moverse en los 8,0 L/100 km.
- Excesiva digitalización. El Espace, al igual que casi todos los modelos de Renault, acusa una excesiva digitalización, algo que no es agradable en primeras tomas de contacto con el vehículo. Se agradece que tenga mandos físicos para la climatización y que algunos de los sistemas ADAS tengan memoria de desconexión, pero moverte con fluidez por los menús del sistema multimedia requiere algo de tiempo. Ah, y el cuadro de mandos no tiene visualización tradicional.
Así funciona el Renault Espace
Bajo el capó delantero hay un pequeño motor 1.2 turbo de tres cilindros y 130 CV que se asocia a dos propulsores eléctricos, uno de 68 CV (que impulsa el vehículo) y otro de 34 CV (que recarga la batería). La potencia conjunta es de 200 CV. Esa batería, por cierto, es de 2 kWh y se ubica bajo los asientos delanteros.
Su capacidad es alta para tratarse de un híbrido no enchufable y eso permite que la conducción eléctrica en ciudad se dé durante muchos momentos, lo que a su vez logra contener mucho el consumo de gasolina.
La transmisión es muy peculiar porque cuenta con una serie de piñones en su interior que combinándose conforman diferentes relaciones, concretamente, dos en modo eléctrico y cinco cuando el motor de gasolina interviene. La experiencia de conducción es algo extraña porque hay importantes saltos entre velocidades y porque los cambios de marcha no se producen siempre que esperas. Sin embargo, su funcionamiento no es insatisfactorio.
Siempre arranca en modo eléctrico (con el motor de 68 CV, puesto que no hay embrague) y después se suma el térmico si se requiere de más potencia o si baja la carga de la batería. A nivel de chasis, aparte de su buen confort, cabría destacar el eje trasero direccional. Este sistema, denominado 4Control, permite girar las ruedas posteriores en 5º por debajo de 50 km/h (en el otro sentido que las delanteras para acortar el radio de giro) y en 1º por encima de esa velocidad.
¿Cuánto cuesta el Renault Espace?
| VERSIÓN | PRECIO |
| Espace E-Tech Full Hybrid Techno | 42.253 euros |
| Espace E-Tech Full Hybrid Techno Esprit Alpine | 44.678 euros |
| Espace E-Tech Full Hybrid Iconic | 46.618 euros |
Los tres acabados se pueden asociar a configuración de cinco plazas o de siete, y no varía el precio en función de la que se escoja.
¿Cuánto cuesta este Renault Espace?
La unidad que hemos probado luce el acabado Iconic y casi todo el equipamiento opcional posible, por lo que su valor asciende a 51.568 euros. Tiene techo panorámico (1.000 euros), equipo de sonido Harman Kardon (950 euros), faros matriciales (900 euros), Head Up Display (800 euros), pintura metalizada (800 euros) y asistente de centrado en carril junto a avisador de exceso de velocidad (500 euros).
