La estupidez humana no conoce límites. Exponer a alguien innecesariamente a un peligro está fuera de toda lógica, pero cuando ese alguien es un menor de edad y el artífice de dicha situación es un progenitor, es algo imperdonable. Esto es lo que ha sucedido recientemente en Georgia (Estados Unidos), donde una madre fue cazada en vídeo mientras llevaba a su hijo en el maletero de un Dodge Challenger.
El vídeo se viralizó, permitiendo a la Policía identificar y arrestar a la madre
JUST IN: Gwinnett County Police have arrested Diana Shaffer after this video shows a child (12) sitting in the trunk while the car went down the road. Police say the mom wanted the child to help hold the object in place @FOX5Atlanta pic.twitter.com/jYrD6N2akS
— Eric Perry (@Ericperrytv) February 28, 2024
Fue el pasado 25 de febrero cuando la Policía del Condado de Gwinnett se enteró del incidente a través de un tercero que vio el vídeo en las redes. El clip en cuestión es el que ilustra este artículo y muestra que en el maletero del Challenger viaja un niño junto a lo que parece ser un moisés para bebés cuyas patas no caben en el estrecho compartimento de carga del muscle car americano, aunque sí parece haber espacio suficiente para un niño de 12 años.
La Policía tuvo que investigar haciendo uso de un sistema de cámaras llamado Flock, lo que permitió encontrar el vehículo e imágenes adicionales que mostraran que el menor viajaba en el maletero y que el vídeo correspondía a un hecho reciente. Con la matrícula del Dodge, pudieron localizar a la propietaria del vehículo, que fue arrestada de inmediato por los agentes.
La madre está en libertad a la espera de juicio
Como era de esperar, la madre fue detenida acusada de un delito de conducta imprudente y circular en un coche sin cinturón de seguridad. Tras el arresto, ingresó en la cárcel del condado, aunque quedó en libertad bajo fianza poco después a la espera de que se celebre el juicio, mientras que un miembro de la familia tomó la custodia del menor.
Si finalmente es acusada de un delito menor de conducta imprudente, la madre se enfrenta a una pena máxima de 12 meses de cárcel y una multa de 1.000 dólares. Por el contrario, si se considera un delito grave, la pena de cárcel puede llegar hasta los 20 años, condena similar a la conducir en estado de ebriedad o a una velocidad extremadamente alta, según las leyes del estado de Georgia. No te pierdas el vídeo.