De vez en cuando la industria del motor da lugar a situaciones curiosas, como la que nos ocupa en esta ocasión: en pleno 2024 se ha vendido un Dodge Viper nuevo. Esto podría no llamar la atención de primeras, pero hay que tener en cuenta que el deportivo americano dejó de fabricarse hace nada menos que siete años, en 2017.
Stellantis ha compartido sus datos de ventas del primer trimestre de 2024 y, entre los cientos de miles de coches vendidos, era imposible no fijarse en uno: un ejemplar del Viper. Es normal extrañarse ante su presencia, aunque la explicación más lógica es que el vehículo fuera de stock y estuviera en algún concesionario que finalmente haya conseguido venderlo.
Otro aspecto llamativo es que este caso no es único ya que, desde que en 2017 se anunciara el final de la producción del Viper de manera oficial, Dodge ha seguido vendiendo ejemplares de mara esporádica aquí y allá.
Otro aspecto curioso es la evolución de ventas que ha tenido en estos últimos años. En 2020 se vendieron cuatro unidades del modelo, cifra que logró replicarse en 2021. Sin embargo, en 2022 no se comercializó ninguno, lo que llevó a pensar que quizá ya no hubiera más ejemplares en reserva.
La sorpresa saltó en 2023, cuando el grupo volvió a vender dos unidades del deportivo. Así, en solo un trimestre ha conseguido la mitad de las ventas del ejercicio anterior, por lo que tiene tiempo para igualarlas e incluso superarlas, si es que sigue habiendo ejemplares a la venta.
Se trata de un dato curioso que está muy lejos de los mejores años del modelo, pues en la década de los 2000 solía rondar y superar las 1.000 unidades anuales. Ya durante todo el ciclo de vida de la última generación se asistió a una caída general del interés, puesto que su mejor año fue 2014, con tan solo 760 ventas.
