El aparcamiento de una comunidad puede convertirse en un escenario de conflicto entre conductores cuando uno o varios de ellos no respetan los límites a la hora de estacionar. ¿Cuánto puede sobresalir un coche de la plaza de garaje?
Cabe destacar que el garaje entra dentro de las zonas comunes de un edificio de viviendas, mientras que la plaza es de propiedad privada. El dueño podrá usarla teniendo en cuenta que su derecho a la propiedad termina donde acaba la superficie de su hueco. O lo que es lo mismo: donde marcan los límites.
El artículo 3.a de la citada norma concreta a qué da derecho cada plaza de garaje: “El derecho singular y exclusivo de propiedad sobre un espacio suficientemente delimitado y susceptible de aprovechamiento independiente, con los elementos arquitectónicos e instalaciones de todas clases, aparentes o no, que estén comprendidos dentro de sus límites y sirvan exclusivamente al propietario”.
¿Tiene alguna excepción esta norma?
Hay dos partes del coche que pueden invadir o rebasar las líneas de su plaza de aparcamiento. La primera de ellas son los retrovisores y la segunda las puertas, pero sólo cuando sea necesario abrirlas para entrar y salir del vehículo.
¿Qué hacer cuando un vehículo sobresale de su plaza?
Si no corrige su mala praxis, se puede recurrir a la Ley de Propiedad Horizontal. Su séptimo artículo apunta que “previa autorización de la Junta, debidamente convocada al efecto, podrá entablar contra él acción de cesación que se sustanciará a través del juicio ordinario”.
En otras palabras, la segunda vía consiste en recurrir a un procedimiento judicial. Una herramienta con la que se puede pedir la intervención de la justicia para que los afectados por el vehículo en cuestión puedan ejercer sus derechos y defender su caso.