Producción del Tesla Model 3
La marca capitaneada por Elon Musk pretende ir un paso más allá con el lanzamiento de su próximo eléctrico de acceso, que tendrá un precio objetivo de 25.000 dólares. En palabras del directivo, «tanto el diseño […] como las técnicas de fabricación están muy por encima de cualquier otra cosa presente en la industria».
La meta de Tesla es lograr que la plataforma del nuevo modelo, que será un SUV compacto, cueste la mitad que la utilizada en los Model 3 y Model Y. Para conseguirlo, prescindirá de la clásica cadena de montaje que el sector lleva más de un siglo evolucionando desde que Henry Ford la implantara para fabricar en serie el legendario Model T (1908-1927).
Producción del Tesla Model Y
La próxima plataforma eléctrica de Tesla costará la mitad que la utilizada en los Model 3 y Model Y
Por otro lado, pintar el vehículo entero en lugar de únicamente los paneles que lo necesiten supone desperdiciar tiempo y energía. Al dividir a los operarios en grupos más pequeños, puede trabajarse de forma simultánea en varias partes del coche. Caresoft predice que la inversión en los talleres de pintura (la parte más cara de una planta automotriz) se reducirá en al menos un 50%, pues en lugar de pintar toda la carrocería, se pintarán sólo ciertos paneles antes de ensamblarlos.
A pesar de lo interesante de esta propuesta, no debemos perder de vista que en el pasado Tesla ha experimentado notables problemas a la hora de llevar a la práctica algunos de sus revolucionarios procesos productivos. Sin ir más lejos, la línea original del Model 3 en Fremont, que estaba altamente automatizada, fue un fiasco. Tampoco podemos dejar de mencionar sus dificultades para escalar la fabricación tanto de las celdas 4680 como de la pick-up Cybertruck. ¿Logrará el método de ensamblaje «unboxed» reemplazar a la longeva cadena de montaje? Lo comprobaremos en los próximos años.
Fuente | Automotive News