A pesar de que en el transporte el hidrógeno cada vez tiene menos sentido, hay aplicaciones donde el vector energético puede tener su espacio. Uno de ellos son las competiciones de motor, donde esta configuración puede ofrecer una alternativa más sostenible a los combustibles fósiles. Ahora, la austríaca AVL ha presentado un prototipo de motor turboalimentado de 2.0 litros con combustión de hidrógeno.
El motor está siendo probado en el laboratorio de la sede de AVL en Graz, y las cifras de potencia son bastante llamativas, al producir 301.7 kW (410 CV) a unas 6.500 rpm con un par de 500 Nm entre 3.000 y 4.000 rpm, lo que corresponde a una presión media (BMEP) de 32 bar.
Esto supone que el motor de AVL supera por ejemplo la densidad de potencia del monstruoso motor del Bugatti Chiron, que se queda en 185 CV por litro, siendo el rival más cercano el V8 biturbo de 6,3 litros del SSC Ultimate Aero TT, que produce 202,8 CV por litro.
Ellen Lohr, directora de Motorsport AVL: “Los resultados obtenidos por nuestro motor de carreras H₂ confirman que podemos ofrecer un paquete extremadamente competitivo con esta tecnología. El objetivo de AVL RACETECH es llevar el deporte del motor hacia un futuro sostenible. Con el desarrollo del primer motor de carreras desarrollado bajo nuestro propio nombre, hemos dado un paso más para lograr esta visión”.
En 2021, se anunció que AVL trabajaría con Ineos para crear un Grenadier con pila de combustible de hidrógeno. Dada la potencia de este impresionante motor, Ineos podría estar interesado en ofrecer un modelo de combustión de hidrógeno que parece encajar con este nicho de mercado de todoterrenos.