- Llave en el teléfono
- Las pantallas crecen
- Hasta 130 CV
- 1.5 de tres cilindros
- Cambio CVT
- Mucha agilidad
- Mejoras e incorporaciones
Quienes se encuentren con el nuevo Toyota Yaris 2024 quizá no sepan distinguirlo del que se lleva vendiendo desde 2020, que tiene el mérito de ser el utilitario (lo que llamamos un segmento B) más vendido en Europa. Pero cambios tiene, y bastantes. Los menos, es cierto, se dan por fuera y afectan a dos aspectos: por un lado la paleta de colores y por otro las llantas. Así, el tono azul Neptuno con techo negro en contraste es novedad en la versión Premiere Edition, que también se puede elegir en Blanco perlado bi tono. Pero no menos atractivo es un Gris Ascari que solo se ofrecerá en la versión GR Sport.
Toyota.
En cuanto a las llantas, Toyota ha presentado nuevos diseños de 16″ para la terminación Active Plus, de 17″ para los acabados Style y Premiere Edition, y de 18″ con franjas en rojo para el GR Sport. Con eso por fuera es suficiente para actualizar un producto de funciona, porque los emblemas GT Sport que ha recibido la variante más deportiva y el motivo en forma de G que ahora luce en su parrilla son bastante discretos.
Llave en el teléfono
El interior del coche es donde se concentran la mayoría de novedades. Y más cuanto más nos adentramos en sus ‘entrañas’. Por lo que respecta al habitáculo, la primera novedad es que ya no hace llevar la llave física, porque en las versiones Premiere Edition y GR Sport la podemos integrar en nuestro teléfono por medio de la aplicación MyToyota. Esta función, compatible con Android e iOs, no solo abre y cierra las puertas, sino que nos permite encender el motor, incluso a distancia, activar la climatización o encender las luces de emergencia, para encontrar el coche en un parking.
Toyota.
Las pantallas crecen
Y el tercer gran estreno que se aprecia de puertas adentro se descubre en la pantalla de infoentretenimiento, que por un lado ha crecido hasta las 10,5 pulgadas (de 9″ en la versión Active Plus) y por otro está gobernada por un nuevo sistema operativo. Lo que más interesante nos parece de este tercer apartado es que el Yaris puede ahora guiarse mediante navegación en la nube. Es decir, que va a tener en cuenta las incidencias de tráfico y nos mandará por otra ruta si cree que ganaremos tiempo. Aun así, es de justicia mencionar que desde la versión Style disponemos ahora de cargador inalámbrico para nuestro teléfono.
Poco más se descubre en parado, además de detalles de acabado que destacan sobre todo en el GR Sport, que viene con asientos deportivos en Alcantara con emblemas GR (también están en el votón de arranque y el volante), costuras más vistosas, volante en cuero perforado y pedales deportivos.
Hasta 130 CV
En cuanto a motores, el Yaris cuenta con la quinta generación de propulsores híbridos de la marca japonesa. La versión más potente ha incrementado su potencia hasta los 130 CV, con una mejora del par motor de 141 a 185 Nm a cualquier régimen, y para ‘sacarse de la chistera’ este incremento los ingenieros japoneses han instalado un motor-generador eléctrico más potente y con mejor lubricación, que se ha acompañado de cambios en el software y el hardware de la Unidad de Control de la Energía (PCU).
Toyota.
Sin embargo los responsables de Toyota que hemos encontrado en Sitges, donde ha sido su presentación internacional, parecían casi más orgullosos de que el consumo medio de la versión 130H se haya quedado en 3,9-4,3 l/100 km, cuando el del 120H es de 3,8-4,9 l/100 km. Y, en consecuencia, que las emisiones medias sean de 87-98 g/km de CO2 (87-98 en el 120H).
1.5 de tres cilindros
El motor térmico sigue siendo un 1.5 de tres cilindros con doce válvulas y sistema de distribución de válvulas variable que entrega 85 CV en la versión más sencilla y 96 CV en la más potente. Este motor térmico es el que marca las diferencias, porque los motores eléctricos (síncronos de imagenes permanentes) son casi idénticos en rendimiento, con una ventaja de 83 CV en el 130H frente a 80 CV en el 120H.
Toyota.
Del funcionamiento general de su propulsión, y además de un consumo muy bajo (a nosotros, combinando trayectos urbanos con un poco de carretera de montaña a ritmo algo enérgico se nos quedó en 4,5 litros/100), lo que nos ha gustado es por un lado cómo el motor eléctrico toma el mando en aquellos momentos urbanos que penalizarían el consumo en ciudad (por ejemplo, al acelerar para salir de una rotonda).
Cambio CVT
Y por otro, que el cambio CVT no muestra tanto ‘desajuste’ como recordamos de antiguos Toyota entre la aceleración y el incremento del ruido. Si se pisa el pedal derecho de golpe es cierto que se produce este extraño efecto, pero los ingenieros de Toyota lo han ido haciendo cada vez menos apreciable.
Levas no tiene ni para el motor térmico ni para modificar la regeneración de la batería. Con lo que sí cuenta es con un modo B en el selector del cambio (algo grande, por cierto), pero para accionarlo tenemos que pulsar primero un botón en el pomo y además el cambio en la retención no se aprecia demasiado.
Mucha agilidad
Más allá de ello están las buenas sensaciones dinámicas de un coche que pesa 1.175 kg en la versión 130H que hemos probado (la 120H se queda en 1.110 kg), lo que resulta contenido para un modelo híbrido por mucho que la batería de litio que oculta bajo el asiento trasero sea de solo 0,76 kWh. Eso, sumado a que el Yaris es de los modelos más cortos de su segmento en cuanto a distancia entre ejes (2.560 mm) le otorgan una agilidad ratonera y sin que haya sido necesario realizar cambios en cuanto a chasis.
Versión GR Sport.Toyota.
Un despliegue tecnológico que debemos reconocer como muy amplio (para un coche de este segmento) acompaña al Yaris. El pequeño Toyota ya contaba con Monitor de ángulos muertos (BSM), Advertencia de tráfico transversal trasero (RCTA), luces de carretera automáticas (AHB), Freno de asistencia al aparcamiento (PKSB) y sensores de aparcamiento posteriores, entre otros elementos.
Ahora, además, ha mejorado algunos de sus sistemas y ha añadido otros nuevos a su dotación. Entre las mejoras están la del sistema anti-colisión (PCS), que ahora reconoce más posibles objetos o vehículos con los que nos podemos chocar, incluidas las motos.
Mejoras e incorporaciones
También se han perfeccionado el Control dinámico de velocidad de crucero por radar (DRCC), que tiene en cuenta las curvas o rotondas para adecuar la velocidad a la que las tomamos; y un Sistema de mantenimiento en el carril (LTA) recalibrado para actuar de forma más natural, y que ahora se ajusta a la velocidad indicada en las señales si pulsamos el botón del limitador de velocidad.
Pero a todo ello se añaden cinco nuevos sistemas con los que el Yaris antes no contaba. Así, encontramos ahora el Control de la aceleración involuntaria a baja velocidad (no nos deja acelerar si existe riesgo de que nos choquemos contra el vehículo que circula delante), la Asistencia de emergencia a la dirección (corrige la trazada en caso de una situación peligrosa), la Asistencia a la conducción proactiva (si levantamos el pie derecho, la desaceleración se hace de forma suave), el Asistente de salida segura (nos avisa si vienen vehículos por detrás para que no abramos las puertas) y el Sistema de detención automático en caso de emergencia (si el conductor no reacciona al tráfico o la carretera, el coche puede llega a detenerse por completo).
La gama del Toyota Yaris híbrido, que ya está disponible en nuestro país, tiene precios que van de los 22.400 euros que cuesta la versión Active Plus a los 26.150 euros que tenemos que pagar por el Premiere Edition.
