Alcanza una velocidad máxima limitada electrónicamente de 350 km/h y no llega a los 1.300 kilos.
Han pasado más de cuatro años desde que vimos por primera vez el Imola coupé basado en el Huayra y ahora Pagani presenta por fin la versión Roadster. Aunque el Codalunga es técnicamente el coche más nuevo de la compañía, la exótica marca italiana quiere alargar la vida del Huayra.
Hay una buena razón para que tenga un paquete aerodinámico tan salvaje: el diseño se inspira en el Huayra más impresionante jamás construido. Estamos hablando del R, una bestia sin concesiones, sólo para circuito. La gran diferencia es que Pagani ha diseñado el Imola Roadster para su uso con tráfico abierto.
Pagani Imola Roadster
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Un roadster extremo con matrícula
Este motor biturbo de 6,0 litros ofrece nada menos que 850 CV y 1.100 Nm. Se combina con un caja secuencial de siete velocidades desarrollada por Xtrac específicamente para Pagani. A fondo, alcanza los 350 km/h antes de que se active el limitador electrónico. Por cierto, hay un sólo eje motriz, el trasero.
Al igual que el Audi R8 GT2 enfocado a la pista pero homologado para carretera, el Imola Roadster monta neumáticos Pirelli P Zero Trofeo R: 265/30 R20 en el eje delantero y 355/25 R21 en el trasero, y envuelve las llantas de aleación forjadas.
Sólo ocho unidades
Pagani no se ha pronunciado sobre el precio, pero afirma que el Imola Roadster estará limitado a sólo ocho unidades, por lo que es ligeramente menos exclusivo que el coupé, del que sólo se fabricaron cinco ejemplares.