Ya conocíamos el precio del Fisker Pear en Estados Unidos, donde arrancará en su versión más económica en los 29.990 dólares. Pero habitualmente los precios a los dos lados del Atlántico suelen ser algo diferentes por temas de impuestos. Ahora, Fisker ha confirmado que su próximo lanzamiento tendrá un precio bastante competitivo también en Europa.
El objetivo es ensamblar alrededor de 250.000 unidades al año, y su precio de partida en dicho mercado coo hemos comentado, se situará en los 29.900 dólares.
La cuestión es que los precios en Estados Unidos se dan sin impuestos, a lo que habría que sumar los costes logísticos y arancelarios, lo que suele hacer que el precio final aumente de forma significativa.
Bien es cierto que hablamos de un SUV compacto del tamaño de un Volkswagen ID.4, pero dotado de una batería en su variante más económica bastante modesta que le otorgan apenas 320 km WLTP. Por su parte, la versión de más alcance llegará a los 560 km WLTP, pero claro, con otro precio.
El habitáculo ha sido diseñado para resultar duradero, por lo que carece de elementos frágiles y/o móviles. El Lounge Mode permitirá plegar todos los respaldos hacia atrás (incluidos los de la segunda fila) para crear una suerte de sala de estar, una solución que recuerda en cierta medida al primer Renault Twingo, cuyos asientos podían convertirse en una cama de matrimonio.
Contará de serie con una gran pantalla táctil de 17,1 pulgadas para el sistema de info-entretenimiento, que podrá utilizarse para ver películas. La marca también hace hincapié en el empleo de materiales reciclados y de origen biológico.
Un modelo que comenzará el próximo año sus ventas, pero que no llegará al mercado hasta 2025.