Sin duda, es una customización muy alocada.
¿Eres el tipo de persona a la que le gusta idear combinaciones que a la mayoría de la gente no se le ocurrirían? Si es así, puede que te guste esta customización de un tipo llamado Kelvin.
Kelvin se considera un tipo normal al que le gusta trabajar en las motos, para que quede claro. Es el tipo de persona que aprendió a amar las reparaciones al lado de su padre, cuando era un niño, y continuó con ese amor en la edad adulta y trabajando en sus propios proyectos. No se considera un ingeniero de profesión, solo un tipo mañoso por pasión.
Un año de trabajo
Sin embargo, cualquiera lo diría viendo lo que ha hecho aquí. Mira el vídeo y verás que todo parece muy bonito y bien montado. Además, hay una nitidez en esta construcción que no siempre se ve, en particular de alguien que solo lo hace en su tiempo libre, y no como un constructor profesional.
Un punto curioso es que el pequeño radiador está perfectamente escondido en la parte delantera, aunque se puede ver si se abre la guantera.
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Algo más de 6.200 euros de gasto
¿Cuánto costó todo? Dado que Kelvin vendió las piezas de la moto donante RD350 que no necesitaba, calcula que todo le supuso unas 5.500 libras (unos 6.270 euros), más o menos. Por supuesto, esa cifra no tiene en cuenta las largas horas que le llevó completar el proyecto, pero ¿quién las cuenta cuando se trata de algo que se hace por diversión?
Es una construcción asombrosa, y debe ser bastante sorprendente verla en persona. Si te preguntas a qué velocidad va, Kelvin dice que ha alcanzado unos 145 km/h. No la ha llevado a un banco de potencia y no tiene previsto hacerlo, pero este moto ha pasado de ofrecer 6 CV a disponer de 39, al menos con las cifras oficiales en la mano. No está mal, ¿verdad?
