- Infraestructura deficiente y demanda creciente
- Subsidios a combustibles fósiles: un obstáculo persistente
- Desafíos financieros en las economías en desarrollo
- La necesidad de voluntad política
- Estrategias para mejorar la eficiencia energética
- Innovación en financiación de energías renovables
- Hacia un compromiso global más efectivo
A pesar de alcanzar un récord en la capacidad instalada, el mundo sigue agregando menos de la mitad de la capacidad de energía renovable necesaria para cumplir con los compromisos climáticos globales, reveló el think tank REN21. El año pasado, se incorporaron 473 gigavatios de capacidad renovable, un aumento del 36%, pero aún lejos de los 1,000 gigavatios anuales requeridos. Problemas como la demanda energética creciente, especialmente en economías en desarrollo, y la falta de inversión en infraestructura de red, están frenando la transición desde los combustibles fósiles hacia fuentes más limpias y sostenibles.
Infraestructura deficiente y demanda creciente
El desafío más crítico al que se enfrenta el sector de las energías renovables es la infraestructura de red inadecuada. Según REN21, aproximadamente 3,000 gigavatios de proyectos renovables quedaron en espera el año pasado debido a la falta de conexiones a la red adecuadas. Esta brecha en la infraestructura no solo retrasa la puesta en marcha de nuevos proyectos, sino que también afecta la eficiencia y la estabilidad del suministro de energía renovable.
Subsidios a combustibles fósiles: un obstáculo persistente
Otro factor significativo que impide un avance más rápido hacia las energías renovables es la persistencia de subsidios a los combustibles fósiles. En 2022, los países del G20 destinaron un récord de 1.3 trillones de dólares a estos subsidios, distorsionando el mercado en favor de las fuentes de energía más contaminantes y haciendo que las renovables parezcan menos competitivas económicamente. Reducir y eventualmente eliminar estos subsidios es crucial para nivelar el campo de juego y fomentar una adopción más rápida de las energías renovables.
Desafíos financieros en las economías en desarrollo
La necesidad de voluntad política
REN21 enfatiza que la tecnología para reducir significativamente las emisiones de CO2 ya existe; lo que falta es la voluntad política para implementarla a gran escala. Los líderes globales en las conversaciones climáticas, como las de la COP28, han establecido ambiciosos objetivos para triplicar la capacidad de energía renovable y duplicar la eficiencia energética para 2030. Sin embargo, establecer metas es solo el primer paso; cumplirlas requiere políticas concretas, inversión sostenida y una acción decidida contra los intereses establecidos en los combustibles fósiles.
Estrategias para mejorar la eficiencia energética
Innovación en financiación de energías renovables
Desarrollar nuevos modelos de financiación que reduzcan el costo del capital para proyectos de energías renovables en mercados emergentes es otro paso crucial. Esto podría incluir garantías de crédito, fondos de inversión en verde o bonos climáticos, que podrían proporcionar la seguridad necesaria para atraer inversiones privadas a mayor escala. Además, el apoyo continuo de las instituciones financieras internacionales y los acuerdos de financiación climática global pueden ofrecer los recursos necesarios para que estos proyectos sean viables.
Hacia un compromiso global más efectivo
Para superar estos obstáculos y acelerar la transición energética global, es esencial un compromiso más profundo y coordinado entre las naciones. La colaboración internacional puede facilitar la transferencia de tecnología, compartir mejores prácticas y movilizar recursos financieros a una escala que ningún país podría lograr por sí solo. Este enfoque colaborativo es especialmente crucial para apoyar a las economías en desarrollo, donde la necesidad de energía limpia y accesible es más urgente pero también más difícil de financiar.