El Bentley Bentayga S en sus dos potentes motorizaciones V8 y V6, esta última híbrida, saca su lado más deportivo con la nueva edición Black Edition
El Bentayga es la gallina de los huevos de oro para Bentley y la marca inglesa no deja de promocionar a su SUV todo lo que puede mediante ediciones especiales, limitadas o one-off para que sigan cayendo ventas como churros. En este caso el protagonista es el Bentayga S, una versión que saca a relucir su lado más oscuro y siniestro gracias a la nueva edición Black Edition, lo que le sirve para acentuar todavía más el carácter deportivo de este modelo.
Todo esto se combina con los pequeños y discretos cambios que a principios de año la marca introdujo en el Bentayga como, por ejemplo, una parrilla delantera rediseñada, una nueva tecnología de chasis, una nueva arquitectura eléctrica y la introducción de la dirección a las cuatro ruedas en la versión BEW así como las llantas de 21 pulgadas, las cuales para la versión S Black Edition se sustituyen por unas de 22 pulgadas pintadas en negro tras las que se esconden unas pinzas de freno pintadas a juego.
En el interior del Bentley Bentayga S Black Edition también se producen cambios en el mismo sentido. Así se ha creado un contraste entre la tapicería en piel Beluga y colores brillantes aplicados en zonas como las costuras o secciones estudiadas de la tapicería, a lo que hay que sumar el emblema «S» bordado en negro en cada asiento. A esto hay que sumar que se ha creado un nuevo trenzado en la fibra de carbono aplicada en el salpicadero, la consola central y las molduras de la zona de la cadera, a las que añade cierta profundidad creando un efecto tridimensional. También equipa de serie el pack Dark Chrome, que sustituye el cromo brillante original en la salidas de aire, las rejillas de ventilación centrales y los mandos tipo órgano por el color negro brillante.