En el marco del Mes de la Historia de la Mujer, Bentley presenta tres unidades únicas que homenajean a tres mujeres con vínculos directos con la marca
En la historia de Bentley y especialmente durante la década de los años 20 destacaron los que se denominaron como «Bentley Boys» por su aportación a la reputación de la marca tanto en el mundo de la competición como a nivel comercial, intentando mantenerla en todo lo alto. Pero en esa década también tuvieron jugaron un papel importante para la marca las mujeres a las que también denominan como «Bentley Girls«.
Como sabéis el pasado 8 de marzo se celebró en numerosos países a lo largo y ancho del mundo el Día Internacional de la Mujer pero, además, en países como Estados Unidos, Australia y Reino Unido también celebran el Mes de la Historia de la Mujer. Por eso en estos días de celebración Bentley, como marca británica, quiere conmemorar con motivo de ambos actos a las «Bentley Girls», concretamente a tres mujeres que de una u otra manera contribuyeron de manera directa en la historia de la marca, haciéndolo con tres unidades exclusivas del Bentayga.
Mary Petre Bruce
En lo que se refiere a coches, Mary participó en distintas pruebas como el Rally de Monte Carlo de 1927 y estableció también distintos récords en pruebas de resistencia ya fuera acompañada de su marido para llegar a lugares como el Círculo Polar Ártico o en solitario, como el que fijó en 6 de junio de 1929 a los mandos de un Bentley de 4½ litros en una prueba en Francia durante 24 horas, recorriendo un total de 3480 kilómetros con una velocidad media de 143 km/h y jugándose el pellejo con unas condiciones ambientales muy duras. A pesar de todo logró el récord mundial de conducción sin asistencia y, para darle todavía más épica, Mary nunca había conducido un Bentley y tuvo que pedir prestados cojines para llegar a los pedales.
Ahora Bentley homenajea a Mary Petre Bruce con un Bentayga Azure con especificación Blackline al que se le ha aplicado una pintura perlada Parson Green en su carrocería que recuerda al 4½ litros de Mary, mientras que por ella y por su vida en el mundo de las carreras se ha instalado una insignia de una bandera a cuadros en el Pilar C. En el interior hay inserciones en oro de 24 quilates para enfatizar su mentalidad ganadora y lujoso estilo de vida; tapicería para los asientos a medida con inserciones de nácar con la leyenda «YV 7263» que fue la matrícula de su Bentley. Otras inserciones, también en nácar, son utilizadas en referencia a las perlas debido a una mítica frase que pronunció: «Nunca me gustaron los monos ni los pantalones, sino que siempre conducía con una blusa, una falda a medida y un collar de perlas».
Dorothy Paget
Precisamente el Bentley 4½ litros fue un modelo emblemático y trascendental para la marca y en una versión posterior de este modelo fue principal protagonista Dorothy Paget, que ahora nos atañe. Dorothy era una amante de la velocidad, ya sea con caballos o con coches, lo que le llevó a recibir unas lecciones de conducción de Sir Tim Birkin, otro «Bentley Boy», y que la describió como una conductora excepcional capaz de manejar y adaptarse a cualquier tipo de vehículo.
Precisamente en 1929 el propio Birkin estaba obsesionado con sacar más rendimiento del Bentley de 4½ litros para ganar más carreras y, para ello, creía que era necesario el sobrealimentador de Amherst Villiers. En este punto fue donde le ayudó la amistad que le unía a Dorothy Paget, ya que ella se encargó de patrocinar un equipo de carreras de «Blowers Bentley» (que era como se le conocía a este Bentley con turbo) a pesar de la oposición del mismísimo W.O. Bentley. Se construyeron cuatro unidades, y el equipo de Birkin compitió junto al equipo de Bentley’s Works en Brooklands y Le Mans, precisamente el Bentley número 2 conducido por Birkin en Le Mans en 1930 se convirtió en el más icónico y famoso a pesar de no haber ganado nunca una carrera.
Diana Barnato
Diana Barnato es de las tres ya que ya contaba con referencias directas hacia Bentley, y es que ella es la hija menor de Woolf Joel Barnato, uno de los «Bentley Boys» que participó como piloto de la marca y a la que ayudó de manera directamente a mantener a flote finaciéramente en los momentos más críticos de la marca. En lo que respeta a Diana, fue una experta y reputada aviadora que se convirtió en una de las primeras mujeres piloto de la Air Transport Auxiliary (ATA) durante la Segunda Guerra Mundial, además de conseguir diversos récords como ser la primera mujer británica en romper la velocidad el sonido.
Con mano en Bentley era normal que Diana tuviera un Bentley, concretamente un Bentley de 4¼ litros Park Ward Dove Grey, aunque esta berlina no ha sido la elegida para inspirar al Bentayga S que la homenajea sino que que ha sido el Spitfire, su avión favorito. De esta manera el Bentayga S se presenta en Smoke Green con detalles en amarillo como en el famoso caza, cuyo emblema también se encuentra representado a través de una placa en el pilar D. El interior de este Bentayga S presenta una combinación para su tapicería de los colores verdes y marrón, en referencia a la cabina del Spitfire MK9.
