Ser una marca de coches estadounidense especializada en coches eléctricos es complicado, puesto que Tesla se ha convertido en el referente. A pesar de ello, otras compañías intentan hacerse su propio nombre como son Lucid y Rivian. El camino para conseguirlo pasa por ofrecer gamas más amplias y con modelos más asequibles, algo que la última busca con el Rivian R2.
Hermano pequeño del dúo formado por los R1T, pick-up, y R1S, todocamino; para este escalón inferior la compañía ha optado por ofrecer solo la carrocería SUV, que es la que a priori debería tener más demanda por parte de los clientes.
En cuestión de imagen mantiene intacto el lenguaje de diseño de Rivian. Así, a pesar de sus formas rectangulares, los bordes están suavizados, lo que le da un aspecto imponente pero amigable.
El frontal luce la misma peculiar firma lumínica, con dos grupos ópticos verticales ovalados cruzados por una ancha barra horizontal que se extiende hasta los pasos de rueda. Los bajos cuentan con protecciones de plástico, los paragolpes disponen de refuerzos de aluminio, la carrocería presenta un acabado bitono con el techo en negro brillante y en la zaga los pilotos ocupan todo el ancho del vehículo.
El interior, a pesar del tamaño del coche, solo tiene capacidad para cinco personas, así como un maletero de gran volumen, aunque éste no se ha concretado.
En la línea de muchos coches eléctricos, prescinde de botones físicos, aunque esa sea una decisión que le cueste las cinco estrellas en los test de seguridad europeos. En lugar de ellos, opta por concentrar toda la información en dos pantallas, una central de gran tamaño y un cuadro digital algo más pequeño, pero cuyas dimensiones concretas no se han revelado.
A la caza del Tesla Model Y
La aproximación del Rivian R2 es similar a la del modelo de la marca de Elon Musk, aunque tiene ciertas diferencias.
Su gama estará formada por una variante de un solo motor con tracción trasera, una versión con dos motores y tracción integral, y el tope de gama, el Tri-Motor, con tres propulsores y también con tracción a las cuatro ruedas. No ha desvelado las especificaciones de ninguna de ellas, más allá de que la superior bajará de los tres segundos en el 0-100 km/h.
Por lo que respecta a baterías, estarán disponibles dos pilas, consiguiendo en el mejor de los casos 483 kilómetros de autonomía.
Un punto importante es su precio, que estará en torno a los 45.000 dólares, cuantía bastante inferior a lo que cuesta su hermano mayor. LA compañía espera comenzar las entregas del modelo en la primera mitad de 2026.
