Hay un nuevo líder entre los autos standard del Circuito 6 del Gálvez. Nota y video de Paul Szebesta.
Texto de Paul “Coloflow” SzebestaPiloto oficial de Motor1 y creador de Racing Films
Nota complementaria al video del Ranking de Motor1 (ver video abajo)
Esta prueba me entusiasmaba bastante. ¿Por probar un Lotus? No, porque venimos de manejar la unidad más extrema de la marca que hay en nuestro país y que se adjudicó el récord entre los autos modificados del Ranking Motor1 (leer más). Me entusiasmaba que este Lotus se encontraba en su estado original y que fuera el único auto que -luego de tanto tiempo- podía hacerle frente al líder del ranking de autos standard: el Mustang Mach-1 (ver nota).
Para colmo, había un ingrediente más que hizo la prueba bastante placentera: el dueño del auto se quería ir del Gálvez con el “Número 1”, sí o sí: me dio total libertad para acelerarlo a fondo. Estas situaciones a mí no dejan de sorprenderme. Es tal como pasó en su momento con Mr. Black y su Toyota GR Yaris: su auto tenía apenas unos días en circulación y su dueño, lejos de pedirme que no lo castigara demasiado, me obligó a exigirme a mí y al auto al máximo para lograr el mejor tiempo posible: el resultado fue impresionante (ver nota). Con el Evora 410 Sport pasó algo parecido, así que me di el lujo de hacer varios giros hasta lograr el tiempo buscado. Todos los detalles del auto se los describo a continuación.
Posición de manejo
Excelente. Este ítem ya se vuelve una obviedad en los Lotus. Con las piernas estiradas y volante cerca, logramos una posición óptima de manejo. Pero en este Lotus nos encontramos con un interior bastante diferente al Exige. En este caso se deja de lado lo rudimentario de aquél modelo y se busca algo más de confort. En ese sentido, nos encontramos un torpedo un tanto más equipado, aunque no demasiado: una pantallita de la marca Alpine debe conformarnos si buscamos tecnología y confort.
Pero sabemos que esos atributos no predominan en los Lotus de esa época. Sin embargo, mejoran los materiales en relación al Exige. El tablero es analógico, con velocímetro y tacómetro bien grandes. A estos los acompañan dos pantallas de cada lado, una para los datos principales (como hora, temperatura y odómetro), mientras que en la otra podemos elegir qué información ver ya sea presión de neumáticos, cronómetro, consumo, etcétera. El volante tiene un tamaño bastante mayor al Exige, y en este 410 Sport no encontramos botones, como sí los hay en versiones más ‘tranquilas’ del Evora.
La pedalera y palanca de cambios son iguales que en el Exige, como también la mayoría de los botones y comandos. Las que merecen un párrafo aparte son las butacas, que si bien tienen un diseño parecido al del Exige, acá encontramos mejores materiales: me sorprendieron por el buen trabajo que hacen para sostener el cuerpo.
Temía que, al no contar con cinturón de cinco puntos, fuera a moverme bastante adentro de la butaca, pero lejos de eso: nos mantienen firmes en cada momento. Sin dudas, son las mejores butacas originales de todas las que pasaron por este Ranking.
Diseño
Muy bueno. Desde ya, hay que tener en cuenta que este auto se lanzó internacionalmente en 2009 y llegó por primera vez a la Argentina en 2018. Sin embargo, a mi criterio, sigue siendo muy lindo y llamativo. Lo que más me gusta es cómo se estrecha a la altura de las puertas y vuelve a ensancharse a medida que nos acercamos al tren trasero. A su vez, todo el trabajo aerodinámico tanto para generar carga adelante como para que respire el motor, genera una sucesión de líneas que lo transforman casi en un “Batimóvil”. Vale aclarar que este auto recibió un ploteo completo, respetando su color original, pero con una base mate, distinta al gris brilloso con el que salió de fábrica. Como dije alguna vez, para mí no existe mejor combinación de colores que gris plata con llantas negras. A su vez, una de las diferencias de la versión 410 Sport en relación a las “normales” es que tanto el techo como el capot están hechas en fibra de carbono para ahorrar kilos.
Suspensión
Excelente. Con paralelogramo deformable en ambos ejes y amortiguadores. Y acá es donde el Evora empieza a separarse del Exige. Si bien el Exige tenía una suspensión modificada, en los primeros metros nos damos cuenta que este ítem en el Evora es un poco más amigable y no vas a ir rebotando en cada giro de las ruedas. Pero ojo, sigue siendo un deportivo de alto rendimiento, por lo cual, si bien es un poquito más blando, sigue predominando la rigidez y el recorrido corto de amortiguador. A eso hay que sumarle un centro de gravedad bastante bajo, por lo que el auto gestiona bastante bien tanto los cabeceos a la hora de frenar y acelerar, igual que los balanceos laterales en los pasos de curva.
Frenos
Excelentes. El Lotus Evora 410 Sport equipa discos de 370 mm adelante y 350 mm atrás, con pinzas AP Racing de cuatro pistones en las cuatro ruedas. Si bien en el episodio anterior ya experimenté el gran poder de frenado que logra Lotus, cuando me subí al Evora esa sorpresa no hizo más que crecer. Es impresionante lo bien que frenan estos autos, desde ya ayudados por su bajo peso, pero sobre todo impresiona que logren mantener la capacidad de frenado a lo largo de las vueltas y cuando la temperatura se hace cada vez más alta. Con el Evora llegué a la Curva 1 a unos 206 km/h y con frenar unos metros antes del cartel de 100 metros me alcanzó para entrar perfecto en la curva. Impensado con cualquier auto standard que llegue a esas velocidades y sin dudas algo a lo que me tuve que acostumbrar, ya que en las primeras vueltas me sobraba pista constantemente en cada uno de los frenajes.
Dirección
Excelente. Acá encontramos otra de las diferencias con el Exige. En aquel auto no había ninguna asistencia en la dirección, mientras que en el Evora tenemos asistencia hidráulica. Preferiría que no tenga nada, pero recordemos que este modelo intenta ser un poco más civilizado y para uso diario. De todas maneras, la dirección se comporta de maravillas y nos da un perfecto feeling en cuanto al grip que tenemos en el tren delantero.
Caja
Excelente, manual de 6 velocidades. Bueno, esta vez no costó tanto hacer entrar los cambios como en el Exige. En el Evora encontramos una rigidez de selectora parecida a la de su hermano, pero acá no tenemos esa explosión de potencia cuando aceleramos, por lo cual nuestra interacción con la caja se hace un poco más amigable. Los cambios no oponen demasiada resistencia para entrar y, sin dudas, es más cómoda de operar en el uso diario que la del Exige.
Motor
Excelente. Aquí, como en la mayoría de los Lotus de esta época, no hay diferencias. Encontramos el mismo motor provisto por Toyota: el V6 2GR-FE que tienen los Camry y los Lexus GS. En este modelo, con cifras de 416 cv y 410 Nm. Si, claramente se nota que empuja menos que el Exige, donde era demencial la aceleración que tenía. Ahora, si lo tomamos por sí solo y obviamos la comparación, el motor se comporta de manera excelente, desarrollando muy buenas velocidades y entregando el torque de manera muy pareja. A eso hay que sumarle un sonido hermoso, que nos acompaña a lo largo de la vuelta. La única queja con este motor, al igual que en el Exige, es que el corte está clavado en las 7.000 rpm y a uno le encantaría poder estirarse un poco más en las evoluciones. Pero son caprichos de niño con T.O.C. de motores aspirados. En cuanto a su performance, no hay nada que objetarle.
Ayudas electrónicas
Aquí no encontramos diferencias en cuanto al Exige. Tenemos los mismos modos de manejo: el Normal, es decir, con todo conectado. El Sport, que nos dejará jugar muy tímidamente. El Race, que se adapta a nuestro manejo y a los neumáticos que equipa el auto. Y, por último, y el utilizado, el totalmente desconectado. Hay que aclarar que en el reemplazo de este modelo, el Emira (ver nota de lanzamiento), los controles no se pueden desconectar totalmente. Mal ahí, Lotus.
Neumáticos
Muy buenos. Este Evora 410 Sport equipa unos Michelin Pilot Sport Cup2 235/35R19 adelante y 285/30R20. Este modelo de neumático, como ya sabemos, son excelentes. El problema radica en que son los mismos con los que ingresó el auto al país allá por el 2018. El auto cambió de dueño a mediados del año pasado y tiene tan solo 1.924 kilómetros recorridos. Esto quiere decir que tiene cauchos nuevos, pero con varios años encima, lo cual no es la condición ideal. De todas maneras, se comportaron muy bien y, como suele suceder en estos autos, se empezó a notar el decaimiento de los delanteros a medida que iban tomando temperatura.
Comportamiento
Excelente. Me encantó. La mayor virtud de Lotus, sin dudas, está en el frenado. A su vez, el motor no es tan extremo como en el Exige, pero también empuja muy bien. ¿Y como anda el chasis? Bueno, acá me llevé una grata sorpresa. Es que, al ser un poquito más pesado y a su vez tener una suspensión un poco más blanda que en el Exige, el auto se vuelve mucho más llevable. A lo que voy es que no es tan extremo como el Exige, donde tenés que hacer todo a la perfección y con una precisión quirúrgica para sacar el máximo provecho. En el Evora también te tenés que exigir bastante si querés ir rápido, pero es mucho más permisivo a la hora de jugar con el chasis y las transferencias de peso. Desde ya que el asunto de tener poco grip en el tren delantero sigue estando, pero al encontrarnos con un auto más dócil a la hora de maniobrar, transmite la confianza suficiente para empezar a buscar ese sobreviraje del chasis que nos permita acomodarnos mejor en las entradas y salidas de las curvas.
En el Exige esto era casi imposible. Más allá de que fui sumamente conservador en el manejo para cuidar la integridad del auto, con el Exige se hacía muy difícil lograr esas conductas sin miedo a hacer macanas. Con el Evora eso no pasa. A medida que van pasando las vueltas uno se va entendiendo mejor con el auto y -si logramos aprovechar al máximo la frenada- ya tenemos un 40% del trabajo hecho. El resto es animarse a tirarlo con velocidad en los ingresos de curva, de modo que derrape un poquito y nos permita acomodar bien la trompa. Una vez hecho eso hay que esperar a llegar al último tercio de curva para pisar el acelerador a fondo. Ahí el auto jamás quiso derrapar las ruedas traseras, otorgando muchísimo grip. El tren delantero se las arregla bastante bien para darnos dirección.
Lo mejor es que, al ser más permisivo, se vuelve más divertido, ya que el auto no está constantemente recordándonos que si le pifiamos un poquito la cosa se puede complicar a niveles impensados. El Evora nos permite ir rápido, exigidos pero a su vez divirtiéndonos y permitiéndonos aplicar las destrezas de conducción deportiva, sin miedo a matarnos o destruir el auto. Y sé que alguno se va a estar preguntando: ¿dónde el Lotus Exige le ganó al Ford Mustang Mach 1? Bueno, ese análisis es bastante sencillo de hacer. En cuanto a potencia, claramente gana el Mustang. Recordemos que en ese auto tenemos un V8 5.0 aspirado con 475 cv y 569 Nm, junto a una caja automática de 10 marchas con relaciones bastante cortas y súper rápida. Esto da como resultado que el Mustang desarrolló una mayor velocidad final: 217.7 km/h contra los 206.39 km/h del Evora. Así ganó el primer parcial que comprende desde la línea de sentencia hasta la mitad del piano externo saliendo de la Curva 1 (fue -0.191 más rápido).
Recordemos también que el Mustang pesa 1.734 kilos contra los 1.325 del Evora. Esto quiere decir que el frenaje de la Curva 1 el Mustang lo hace en mayor tiempo, tanto por la mayor velocidad alcanzada como también por su mayor peso, que se toman más tiempo en perder velocidad. Luego viene el parcial que comprende desde la salida de la Curva 1 hasta la entrada a Reutemann. Allí también el Mustang gana por -0.151, ya que desarrolla mayor velocidad en un tiempo más corto y sólo pierde respecto al Evora en la frenada de La Confitería. El siguiente parcial va de la entrada de Reutemann hasta la mitad de Ascari. El Mustang llegó a 192 km/h a Ascari, mientras que el Evora a 182 km/h.
La diferencia está en que con el Mustang hay que frenar un poquito más, para hacer esa curva y da como resultado que el parcial lo gane el Evora por -0.020. Pero luego vienen los mixtos, y ahí cambia todo. Seguramente, Colin Chapman se puso contento al ver que -a la hora de transitar los Mixtos- el Evora y su bajo peso sacaron a relucir la filosofía Lotus. Ahí encontramos dos parciales hasta el final de la vuelta, donde el Evora aventajó al Mustang por -0.509 y -0.444. Es que, al Mustang, lo trabado le cuesta. Al tener que gestionar el mayor peso, ahí es donde la mayor potencia poco puede hacer frente a la ligereza del Evora. De todas formas también hay que meter en la ecuación el mayor grip que otorga el reasfaltado del Gálvez, cosa que sin dudas beneficiaría al Mustang, sobre todo en los frenajes, que es donde más duelen los kilos.
Robustez
Excelente. El auto no sufrió ningún tipo de problema ni desgaste mayor a lo largo de la prueba. Lo único que sucedió fue que la pantalla Alpine dejó de funcionar en la segunda salida a pista, ‘tildándose’ y quedando blanca, estimo yo que por el calor que hacia dentro del habitáculo. Recordemos que las pruebas se realizan siempre sin utilizar el aire acondicionado.
Relación precio/deportividad
Muy buena. Cuando el auto se lanzó en nuestro país, allá por el 2018, tenía una precio de 300 mil dólares. No quise preguntarle al dueño cuánto lo pago de segunda mano, pero definitivamente lo vale. Más allá de las prestaciones y las sensaciones que ofrece, se trata de un auténtico deportivo exótico, del cual hay solo dos unidades en el país.
Conclusión
Me encantó el Lotus Evora. La verdad es que, después de haber probado el Lotus Exige (leer crítica), pensé que no iba a haber forma de poder superar al pequeño misil blanco. Pero me equivoqué. Es que el Exige es tan demandante y extremo en su planteo que durante la vuelta vas más concentrado en no pifiar que en disfrutar. Obvio que también se disfruta, no crean que manejar el Exige es “una tortura”. Pero a lo que voy es que, con el Evora, podemos jugar un poco más con el chasis, sin miedo a irnos afuera o que la cosa se complique. Eso da como resultado que la experiencia de manejar se haga más placentera y divertida, al no tener que estar constantemente pensando en cómo hacer para llegar enteros a bóxes.
їY en cuГЎnto al Ford Mustang Mach 1? El Mustang sigue teniendo la mejor relación precio/deportividad de todos los autos que pasaron por el Ranking Motor1. Otorga una gran experiencia de manejo, va rapidísimo y hace muy buenos tiempos. Sin embargo, su elevado peso lo compromete bastante, ya que nos limita mucho a la hora de doblar y acelerar. En este Evora contamos con un poco menos de potencia, pero el comportamiento del chasis es mucho más divertido: su bajo peso nos brinda más libertad para jugar a ser “pilotos por un rato”. Por último, muchísimas gracias al dueño del auto por prestarlo y por la confianza para acelerar hasta lograr el tiempo.
Mediciones:
Tiempo de vuelta en el Circuito 6, 2:00.377. Velocidad máxima en recta, 206,39 km/h. Velocidad media, 126,8 km/h.
Producción: Coloflow (@PaulSzebesta_), RacingFilms, Julián Podesta, Nacho Fedorko, Orly Cristófalo, Fly Medusa y Motor1.
Agradecimiento: Pinturerías Gastón.
