- Toyota opta por el hidrógeno
- Algunos países advierten de la crisis energética
- Mazda y su estrategia
- Datos del eSkyactiv-D
- Conclusiones
- ¿Cuál sería la mejor opción a la hora de comprar un coche?
Son muchas las especulaciones acerca del futuro que nos espera, muchos, quizá demasiados auguran un futuro apocalíptico dónde no habrá diésel suficiente para propulsar los motores. De hecho, muchos aseguran que los más inteligentes serán los que conserven un Mercedes 300d de los 80 que pueda funcionar con aceite usado. Lo cierto es que las reservas son grandes, y aún queda mucho camino a las refinerías y a los coches que funcionan por diésel. Lo más inteligente es observar a Mazda, una gran empresa que se está enfrentando frontalmente a la imposición de prohibir la venta de motores de combustión a partir de 2035.
La mayoría de las marcas han optado por un futuro cero emisiones, son muchos los coches que han abandonado el camino de la combustión interna a pesar de que es lo habitual. Cada marca está buscando su nicho, de hecho, no todos se suman a la electrificación.
Toyota opta por el hidrógeno
Si es cierto que no es sencillo una apuesta justo cuando Europa ha dictado sentencia, es por ello que creemos en la posible prorroga de la norma, o bien, en la posible inclusión de combustibles alternativos en ella. Toyota lo más probable es que guarde un as bajo la manga, porque es una de las empresas más importantes del mundo y de ella dependen muchísimos puestos de trabajo.
Algunos países advierten de la crisis energética
Suiza, hace unas semanas ya planteaba limitar el uso de los coches eléctricos, una noticia cuanto menos llamativa, debido a que puede llegar a ser un reflejo importante de lo que puede pasar en otros países. Antes la posible crisis energética plantean cubrirse las espaldas y no fomentar por ahora su uso. Es importante esta situación puesto que por ahora la tasa de coches eléctricos en España es relativamente baja, pero frente a un crecimiento exponencial podríamos vernos en una situación parecida, aunque sí es cierto que España está mejor preparada ante ese cambio de paradigma.
Mazda y su estrategia
Todo ha partido de la idea de que el motor diésel aún tiene mucho recorrido y es el caso de este Skyactiv, que promete cumplir con la nueva norma de emisiones y varias posteriores. Mazda señala a este propulsor como «potente, limpio y eficiente».
Datos del eSkyactiv-D
Quizá lo que más sorprenda de este propulsor sea su desplazamiento, siendo de casi 3,3 litros, asociado a una carrocería que ya conocemos, la del CX-60. Este motor promete cubrir un nicho de mercado muy importante que se deja casi huérfano de no ser por este coche y propulsor, nos referimos al segmento de grandes carros de carga y remolque.
Se compromete a mantener unos consumos por debajo de 5,4 litros en ciclo WLTP, por lo tanto para el peso que tiene es un consumo más que aceptable. La versión de tracción delantera se queda en unos irrisorios 4,9 litros. Lo que más interesará a esos que necesiten un vehículo para arrastrar caravana, o bien, material de trabajo, puesto que puede remolcar hasta 2500 kilógramos.
Conclusiones
Si bien estamos ante un futuro incierto, no es cierto que nos vayamos a pelear por el último bidón de gasolina o de diésel. Tampoco es cierto que vayamos a tener que turnar para cargar el coche con ese vecino que te cae tan mal. Todo lo que antes hemos mencionado son supuestos tremendistas que suelen despertar cada vez que hay un cambio de paradigma, lo cierto es que ahora es un buen momento para comprar un coche sea diésel, gasolina o eléctrico. Sencillamente es buen momento porque un fabricante no va a vender un producto que no se va a poder usar, porque sería el principio del fin para la empresa.
¿Cuál sería la mejor opción a la hora de comprar un coche?
Es tanta la incertidumbre que existe al respecto que cada vez son más las personas que optan por contratar un coche de renting por todas las ventajas que existen en el mercado. Con el renting, todos los conductores podrán cambiar de coche cada 3 años sin ningún tipo de coste y, además, no tendrán que desembolsar grandes cantidades de dinero porque no tendrán que pagar ni la totalidad del vehículo, ni entradas y todos los gastos están incluidos dentro de las cuotas mensuales.