Ford se viste el mono de competición y se pone serio con un modelo quizá sorprendente para la prueba en la que competirá. La furgoneta SuperVan 4 completamente eléctrica debutará en la próxima cita de Pikes Peak International Hillclimb, que ya se está celebrando en las montañas de Colorado, Estados Unidos. Su turno llegará este domingo 25 de junio.
Ahora, la compañía estadounidense se ha quedado con tres propulsores eléctricos (dos en el eje trasero y uno en el frente) que moverán 1.400 CV, que viene a ser lo mismo que el lleva el Mustang Mach-E 1400. Además, la aerodinámica fue retocada con el fin de suprimir piezas para poder instalar un alerón gigante de fibra de carbono en la retaguardia de la furgo.
Asimismo, debemos comentar que Ford se encontró con el problema de su batería de 50 kWh. Ésta no era capaz de mantener los 2.000 CV iniciales, ya que limitaba su autonomía a unos 35 km. La subida de Pikes Peak tiene 20 km, pero la sinuosidad de sus carreteras podría acabar con la pila, a pesar de que pudiera parecer suficiente.
Se ha eliminado el peso del chasis para una mejor agilidad en el paso sinuoso de Pikes, se ajustaron los frenos cerámicos de carbono y su regeneración, que están escondidos detrás de los nuevos neumáticos de carrera Pirelli. Naturalmente, se ha eliminado cualquier peso superfluo del interior.
Romain Dumas, actual poseedor del récord en Pikes Peak con un Volkswagen ID.R, será quien pilote esta salvajada de furgoneta. Además, será la octava ocasión en la que el piloto francés trate de remontar las montañas del Colorado a los mandos de creaciones tan salvajes como originales.
Por su parte, el supervisor de deportes de motor y WRC de Ford Performance, Mike Norton, agregó: “Creo que valdrá la pena sintonizar nuestros tiempos de ejecución en la montaña”. En definitiva, la furgoneta grande y loca se enfrenta a la montaña grande y loca.