El organismo regulador federal responsable de la seguridad vial en Estados Unidos acaba de abrir otra investigación respecto a un sistema de asistencia a la conducción manos libres, según se dio a conocer esta mañana. Y no, no se trata de un automóvil de Tesla. La Oficina de Investigación de Defectos (ODI, por sus siglas en inglés) de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés) ha iniciado una averiguación preliminar sobre el sistema BlueCruise de Ford, a raíz de un par de accidentes mortales, ambos ocurridos por la noche.
El sistema Blue Cruise de asistencia al conductor de Ford es investigado en EE UU por su relación con dos muertes
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¿Es peligroso el sistema Ford BlueCruise?
Ars Technica
Este artículo fue publicado originalmente en Ars Technica, una fuente confiable de noticias tecnológicas, análisis de políticas de tecnología, reseñas y más. Ars es propiedad de la empresa matriz de WIRED, Condé Nast.
Ford presentó su sistema BlueCruise en 2021. Al igual que el Super Cruise de General Motors, pero a diferencia del Autopilot de Tesla, el BlueCruise fue desarrollado con un dominio de diseño operativo u ODD (por sus siglas en inglés) estrictamente controlado que únicamente permite su activación en carreteras de carril dividido y acceso restringido que hayan sido cartografiadas previamente con tecnología LiDAR.
Además, del mismo modo que el Super Cruise, pero distinto al sistema mucho más peligroso de Tesla, dispone de una cámara infrarroja de seguimiento de la mirada del conductor que desactivará el funcionamiento de la plataforma si determina que el piloto no está prestando atención a la vía.
Esto los convierte en los llamados asistentes de Nivel 2; Mercedes-Benz cuenta con un asistente de Nivel 3 más avanzado que permite al usuario dejar de poner atención, pero solo funciona en embotellamientos y hasta los 65 km/h, y únicamente en California o Nevada (EE UU).
A pesar de los controles de seguridad de un sistema ODD estrictamente delimitado y supervisado por el conductor, BlueCruise no es infalible. En marzo, la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte, que investiga los accidentes pero, al contrario que la NHTSA, no tiene autoridad normativa para obligar a un fabricante de automóviles a adoptar ninguna medida, abrió una averiguación sobre una colisión fatal en la que se vio implicado un Ford Mustang Mach-E en San Antonio, Texas, el 24 de febrero.
Ahora, la NHTSA declara tener conocimiento de un segundo accidente mortal derivado del uso de la plataforma Ford BlueCruise, que, como el de San Antonio, también ocurrió de noche. Ha abierto una investigación preliminar para determinar si el sistema es defectuoso.
El documento presentado sobre la investigación señala que:
“La ODI ha recibido la notificación de dos (2) incidentes en los que se vieron implicados vehículos Ford Mustang Mach-E que colisionaron con vehículos detenidos, que estaban situados dentro de los carriles de circulación de autopistas de acceso controlado. Ambos choques se produjeron en condiciones de iluminación nocturna, y cada siniestro provocó por lo menos una víctima mortal. Los reportes de accidentes recibidos por la NHTSA se presentaron en virtud de la Orden General Permanente 2021-01 (SGO). La investigación inicial de la ODI de ambos accidentes confirmó que [el sistema] BlueCruise se encontraba [activo] en cada uno de los vehículos inmediatamente antes de la colisión.
La ODI ha abierto esta Evaluación Preliminar para investigar el sistema BlueCruise de Ford equipado en los vehículos en cuestión. Esta averiguación examinará el desempeño del sistema en la tarea de conducción dinámica y la supervisión del conductor”.
Ars Technica se puso en contacto con Ford, que respondió que “estamos trabajando con la NHTSA para apoyar su averiguación”.
Artículo publicado originalmente en Ars Technica. Adaptado por Andrei Osornio.
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