Con mejoras en diseño, acabados y tecnología
El exitoso SUV urbano alemán Volkswagen T-Cross se beneficia de una actualización como modelo de 2024, recibiendo retoques estéticos en su diseño y mejorando su tecnología, aunque no estará listo para rodar por nuestras calles hasta principios del año que viene.
El gigante generalista alemán anticipa con más de 6 meses de antelación la puesta al día de su todocamino polivalente Volkswagen T-Cross, modelo presentado en 2018. Esta actualización como modelo de 2024 moderniza algunos elementos exteriores en el frontal, con un nuevo diseño de los paragolpes que integran una nueva luz LED vertical a modo de antinieblas, diciendo adiós la versión de acceso a los faros halógenos en favor de nuevos grupos ópticos con tecnología LED y con la posibilidad de instalar faros LED matriciales IQ.LIGHT en opción. La parte trasera también recibe algunos cambios, incluyendo nuevos diseños en los paragolpes y pilotos LED, cambiando estos últimos el diseño interior en forma de «C» por otro en «X».
Interior rejuvenecido
Uno de los pocos puntos débiles del Volkswagen T-Cross era la poca vistosidad de algunos de sus plásticos en su habitáculo. El nuevo interior de la nueva gama T-Cross 2024 mejorará su aspecto y ofrecerá elementos de equipamiento adicionales desde la versión básica, empleando nuevos materiales suaves al tacto y de mayor calidad percibida en el salpicadero (las versiones Style y R-Line lo incluirán también en los guarnecidos de las puertas delanteras).
El salpicadero también modifica su diseño para incluir de serie una nueva pantalla táctil flotante de 8 pulgadas, dotada de nueva generación del sistema de infoentretenimiento y que aumenta hasta las 9,2 pulgadas en acabados superiores. La instrumentación digital (Digital Cockpit) viene de serie ahora en todas las versiones, como también una cámara frontal multifunción que realiza la identificación de las señales de tráfico con limitación de velocidad.
Como complemento, el acabado Life estrena nuevas llantas de aleación de 16 pulgadas y un volante multifunción forrado de cuero, mientras que los acabados superiores son los paquetes de equipamiento Style (con detalles más elegantes) y R-Line (con detalles deportivos como los asientos delanteros, de mayor sujeción lateral y con la letra R cosida en sus respaldos). El aire acondicionado es de serie, pero para acceder a la climatización automática Air Care Climatronic con botones retroiluminados, tiene que pedirse con coste adicional.
Ahora con mayor capacidad de carga
El Volkswagen T-Cross nació como un modelo contenido de dimensiones pero con un plus de versatilidad, por su diseño cúbico y al incorporar en su bien dimensionado interior para 5 ocupantes, una banqueta trasera desplazable 14 cm longitudinalmente. De esta forma su capacidad de carga es variable, disponiendo de un maletero de entre 385 y 455 litros con la segunda fila de asientos ocupada, y que sube a los 1.281 litros con los respaldos abatidos (hasta la altura de los respaldos de los asientos delanteros).
En el modelo de 2024, la capacidad de remolque del T-Cross mejora, pasando su gancho desmontable a soportar de 55 a 75 kg, y también se ha aumentado la capacidad de carga del portabicicletas montado directamente en el enganche de remolque, lo que supone una ventaja ahora que tanto se usan las bicicletas eléctricas, que pesan considerablemente más que las tradicionales.
El Volkswagen T-Cross se pondrá a la venta en el cuarto trimestre de este año, y se podrá pedir con la gama anterior de colores más tres nuevos: Clear Blue Metallic, Grape Yellow y Kings Red Metallic. No está previsto (o al menos no se adelanta ninguna información) que haya cambios en sus gama motriz, conservando los propulsores actuales en gasolina (el trilicíndrico 1.0 TSI de 110 CV y el cuatro cilindros 1.5 TSI de 150 CV con opción de caja automática DSG) y diésel (el 2.0 TDI desdoblado en 115 ó 150 CV, este último con opción a la caja DSG). Las entregas de las primeras unidades se producirán en febrero de 2024.