La conducción autónoma es una de las claves de futuro para la industria del automóvil. Cada grupo ha tomado una dirección en este aspecto, y ahora ha sido Volkswagen la que ha confirmado que apostará por el conjunto de cámaras de la israelí Mobileye.
Actualmente, Mobileye trabaja con más de 30 fabricantes de vehículos, entre ellos BMW, Audi, Volkswagen, Nissan, Honda y las marcas del Grupo Geely. Varios de los nuevos coches eléctricos que están llegando al mercado cuentan con la tecnología de Mobileye, incluido el primer automóvil eléctrico de Zeekr, el Zeekr 001, que llegará este año a Europa.
Mobileye SuperVision es una de las plataformas de asistencia a la conducción más avanzadas del mundo. Su tecnología permite quitar las manos del volante en diferentes tipos de vías, lo que equivaldría a un Nivel 4 SAE, aunque el conductor debe seguir atento al entorno y las situaciones de tráfico, además de cumplir con la normativa.
También se emplean mapas de alta resolución (Gestión de Experiencia en Carretera) y “sistemas en chip” (SoC) Mobileye EyeQ6. Una combinación que utiliza la inteligencia artificial para realizar las funciones de asistencia al conductor.
Gracias a este conjunto, el vehículo podrá leer un escenario de 360° de su entorno. Al mismo tiempo, el sistema permanecerá conectado a internet en todo momento y, mediante el intercambio de datos con otros vehículos, puede rastrear las condiciones de la carretera fuera del campo de visión en cualquier momento.
Un acuerdo que acerca todavía más la conducción autónoma al mercado general, con unos sistemas cada vez más extendidos y una fabricación en cadena que rebajará de forma sustancial los costes en los próximos dos o tres años, hasta hacerlos válidos también para vehículos de acceso.