Porsche está trabajando en un modelo Boxster eléctrico y planea lanzarlo el año que viene. Sin embargo, una empresa llamada Sacrilege Motors ha transformado un Porsche 911 de 1992 en un coche eléctrico utilizando un motor Tesla. El Porsche 911 clásico fue un destacado deportivo de principios a finales del siglo XX conocido por su icónico diseño, manejo y prestaciones. El modelo actualizado incorpora un motor eléctrico que sustituye al motor de combustión interna original.
El clásico modelo convertido en un eléctrico
Sacrilege Motors, una start-up estadounidense de coches eléctricos, ha presentado el Blackbird, un Porsche 911 clásico equipado con un motor Tesla Model S. El coche ahora tiene una potencia de 373 kW (500 caballos) y 500 Nm de par, cifras muy superiores a las del motor de gasolina de seis cilindros original del coche.
El Blackbird está equipado con una batería de 62 kWh y tiene una autonomía de unos 320 km por carga. Además, el vehículo puede acelerar de 0 a 100 km/h en poco menos de 4 segundos, lo cual es impresionante. Su velocidad máxima supera los 180 km/h, lo que lo convierte en uno de los coches más rápidos del mundo. El Blackbird es un coche de edición limitada, y Sacrilege Motors solo fabricará 10 de estos vehículos únicos. El precio de cada coche es de 400.000 dólares (367.556 EUR).
El Porsche convertido en una bestialidad de máquina
El equipo de Sacrilege Motors eligió Tesla para el motor eléctrico por su experiencia y su excepcional rendimiento. A su vez, ellos estaban buscando el mejor componente para crear un vehículo que marcara la pauta a seguir por los demás. A pesar de la incorporación de baterías y un motor Model S, el Porsche 911 Cabriolet eléctrico completamente negro mantiene su peso original. De hecho, pesa solo 1.500 kg. El Porsche 911 Cabriolet eléctrico ha recibido el apodo Blackbird en honor al emblemático avión SR-71. Este nombre es muy apropiado, ya que el SR-71 es un avión de pasajeros. Este nombre es apropiado, ya que el SR-71 se hizo famoso por su velocidad, que le permitía superar a los misiles que le disparaban.
El uso de un motor Tesla Model S como fuente de energía para el Porsche 911 de Sacrilege Motors ha sido toda una locura, pero en un muy buen sentido; una forma eficaz de elevar las prestaciones y características del deportivo clásico. Con el potente motor y el par instantáneo que proporciona, este coche modificado resulta más rápido y silencioso que la versión original. Aunque, claro, serán pocos los que tendrán la oportunidad de conducir uno de los diez modelos que la empresa venderá.
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