No va a ser el coche más caro que jamás se haya vendido en una subasta (fue el Mercedes-Benz 300 SLR Uhlenhaut Coupé, que se vendió por 135 millones de euros), pero, a buen seguro, sí puede ser el Ferrari más caro jamás vendido, ya que saldrá a subasta el próximo 13 de noviembre en Nueva York a través de la casa RM Sotheby’s.
Denominado Ferrari 330 LM/250 GTO, salió de fábrica en 1962 y las primeras estimaciones es que alcance un valor de más de 60 millones de dólares (algo más de 55 millones de euros).
En las 24 Horas de Le Mans de 1962, lo corrió Lorenzo Bandini y Mike Parkes. Si bien se estrelló y se vio obligado a retirarse en la vuelta 56, el hecho de que haya competido en Le Mans también suma números en la cuenta final de la puja. Pero ahí no acaba la cosa.
El coche perteneció al presidente del Ferrari Club of America y se vendió en los años 80. Ha permanecido en la misma colección durante los últimos 38 años y ha sido minuciosamente restaurado al nivel de un concurso para que no perdiera un ápice de su encanto.
Ganador de diferentes concursos
El Ferrari 330 LM es ligeramente diferente del 250 GTO en el que se basa, ya que tiene un piso más largo para adaptarse al V12 de 4.0 litros. También cuenta con amortiguadores telescópicos, resortes coaxiales y una estructura tubular de acero.
El Ferrari más caro jamás vendido fue un 250 GTO de 1963 que, según las informaciones de aquel momento, se vendió por 70 millones de dólares (cerca de 65 millones de euros) en una venta privada en 2018.