El compacto familiar alemán pasa por ser la versión más potente disponible, a excepción del R 20 Aniversario con 333 CV.
En un panorama actual incierto, ante la llegada imparable de modelos 100% eléctricos en tropel, todavía quedan motivos para la esperanza, en forma de versiones deportivas, incluso en formato familiar, dispuestas a plantar cara, incluso al huracán SUV que lleva arrasando el mercado durante años.
En ese contexto, debemos entender y valorar lo que representa el Volkswagen Golf Variant R, la versión más potente del compacto alemán, en versión familiar, con 320 CV procedentes del motor 2.0 TSI, domesticados por la caja de cambios automática DSG con siete velocidades y el sistema de tracción total 4Motion.
El Volkswagen Golf Variant R 2023, en cinco puntos clave:
Galería: Volkswagen Golf Variant R 2.0 TSI 320 CV DSG7 4Motion 2023
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Diseño
Hablar de aspecto deportivo en un Golf R puede parecer una ‘perogrullada’, pero en este caso, hay que hacer una excepción. El compacto alemán luce una silueta elegante, sin estridencias, pero que deja claro que estamos ante un Golf Variant diferente.
El coche integra elementos específicos, como los paragolpes con diseño ‘R’, la pintura azul Lápiz (815 euros), las llantas de aleación Jerez, de 18 pulgadas (de 19 pulgadas en nuestro caso, que añade la dirección dinámica opcional), spoiler posterior integrado, las carcasas de los retrovisores en cromo mate o las inserciones decorativas ‘Carbon Grey’ en diferentes zonas de la carrocería y el interior.
Otro detalle llamativo son las ópticas IQ.LIGHT, con faros Matrix LED adaptativos e intermitentes dinámicos, con las luces de conducción diurna de diodos luminosos recorriendo el frontal del vehículo. En la zaga, dos colas de escape dobles cromadas aportan esa dosis ‘racing’ que toda buena versión deportiva necesita.
Respecto a las dimensiones, este Golf Variant R tiene una longitud de 4,64 metros, por 1,79 de anchura y 1,46 metros de altura. La distancia entre ejes es de 2,68 metros, lo que asegura un habitáculo más amplio de lo habitual en una variante deportiva, junto con un enorme maletero de 611 litros, algo que valorarán esos padres de familia que no están dispuestos a renunciar a un coche ágil y divertido, pese a que la familia haya crecido en número.
Interior
Accedemos al habitáculo y el cuadro de instrumentos nos recuerda bastante al de un Golf ‘convencional’. Todo parece estar ubicado en el mismo sitio, pero algunos detalles nos advierten de que estamos ante algo más especial.
Por ejemplo, el volante multifunción, que cuenta con un acceso directo al modo de conducción ‘R’. Asimismo, en la consola central, al seleccionar los diferentes modos de conducción disponibles, observamos que disponemos de cuatro a elegir (Comfort, Sport, Race e Individual).
Al activar el modo Race, aparecen otros dos ‘submodos’ denominados ‘Drift’ y ‘Special’ (paquete opcional R Performance por 2.215 euros), que reproduce el trazado alemán de Nürbugring y es el apropiado si vas a pasar una jornada de prácticas en un circuito de velocidad, por ejemplo.
Las levas tras el volante para controlar el cambio automático DSG, además de necesarias, completan esa sensación de deportividad, junto a unos asientos de tipo baquet, muy cómodos, a pesar de su aspecto radical. Están forrados en piel y, opcionalmente, cuentan con ventilación y calefacción, lo que no supone un inconveniente para utilizarlos durante cualquier época del año.
El sistema multimedia, compatible con Android Auto y Apple CarPlay sin necesidad de cables, muestra la información a través de una pantalla de 10 pulgadas, que incluye de serie el sistema de navegación Discover Media.
Los mandos físicos de acceso al sistema de sonido o climatización siguen presentes bajo la pantalla y necesitan de un periodo de adaptación, pero una vez te haces a ellos, todo resulta muy intuitivo.
Por otra parte, la dotación de serie en materia de sistemas de ayuda a la conducción es muy amplia y, entre ellos, encontramos el climatizador de tres zonas Air Care Climatronic, la cámara trasera de ayuda al aparcamiento o diferentes sistemas de ayuda a la conducción como el control de velocidad de crucero adaptativo, la dirección progresiva, el Head-up Display, el diferencial trasero autoblocante, el control de tracción electrónico XDS… y así un largo etcétera.
La suspensión deportiva no es un adversario en este sentido y si eres muy ‘quisquilloso’ en este apartado, siempre puedes optar por la suspensión adaptativa DCC (940 euros), para poner la guinda al pastel.
Mecánica
El Volkswagen Golf Variant R recurre a la conocida mecánica de cuatro cilindros de la casa 2.0 TSI turboalimentada, que para la ocasión alcanza unos admirables 320 CV y 420 Nm de par motor. Como decíamos, la tracción a las cuatro ruedas 4Motion hace que todo ese torrente de fuerza se pueda transmitir de forma segura al asfalto, independientemente, del estado del mismo.
Estamos ante una de las evoluciones más potentes de este motor, solo superada, por los 333 CV del Golf R 20 aniversario y del exclusivo Golf R333. Pocas pegas se le pueden poner a una mecánica que ha rozado la excelencia mecánica dentro de su categoría y que a nivel de rendimiento, alcanza un espacio ocupado por un puñado de elegidos.
Puestos a mejorar el producto de serie, bastaría añadir el sistema de escape deportivo de titanio Akrapovic (4.265 euros) y el paquete R Performance (2.215 euros), por aquello de deslimitar la velocidad máxima hasta los 270 km/h (pero que no nos escuche la DGT).
En materia de prestaciones, el Golf Variant R destaca por su contundencia a cualquier régimen de giro del motor. Si no le exigimos mucho al pedal del acelerador, el motor se comporta de una forma suave y sedosa, sin apenas vibraciones y todo dentro de unos niveles de sonoridad más que aceptables, siempre que tengamos el modo comfort activado (en el resto de modos, la película cambia).
Eso sí, con los datos oficiales en la mano, el vehículo alemán deja pocas dudas sobre la contundencia con la que puede llegar a actuar: 250 km/h de velocidad máxima limitada electrónicamente y 4,5 segundos en la maniobra de aceleración de 0 a 100 km/h. ¡Poca broma!
Respecto a los consumos, este Golf familiar se mueve en una amplia horquilla de registros… según el tipo de conducción que realices. En el día a día, oficialmente anuncia una cifra de 8 litros cada 100 kilómetros, algo que es fácilmente reproducible en el ordenador de a bordo, a poco que cuides la forma de conducir evitando fuertes aceleraciones o apurando en exceso las marchas.
En marcha
Dinámicamente, el Golf Variant R tiene pocos rivales que le puedan hacer sombra. Dada la escasez de participantes en este segmento, si estás buscando un compacto familiar deportivo, tienes pocas opciones, aunque alguna hay.
El paso de los años, al Golf Variant le ha sentado francamente bien. Además de por el aspecto estético, las versiones deportivas han dotado de nuevos e interesantes argumentos al compacto alemán, para atraer a un público menos de nicho y que no necesita un vehículo familiar de mayor tamaño.
La puesta a punto de la suspensión deportiva, junto con la dirección progresiva, hacen que el Golf Variant R no haga ascos a un buen trazado de curvas, incluso sin un asfalto en perfectas condiciones. El coche tracciona una barbaridad y la precisión de guiado del eje delantero confiere mucha confianza al conductor.
En resumen, hablamos de un coche veloz, no tan ágil como la carrocería de 5 puertas, pero que consigue asegurar unas reacciones deportivas en un amplio rango de escenarios. Todo, sin renunciar a su ADN familiar.
Por último, en este apartado cabe destacar la capacidad de frenada del vehículo alemán, tanto por comportamiento como por tacto. Los enormes discos de freno delanteros ventilados y perforados de 357 mm cumplen a la perfección y ese detalle también transmite mucha confianza al conductor.
Equipamiento y precio
Del equipamiento ya hemos ido desgranando pinceladas a lo largo del texto y poco más se puede añadir, salvo que es muy completo y que lo puedes hacer excepcional… a base de gastarte unos cuantos euros más en opciones… aunque una vez metidos en faena, ¿qué son 8.000 o 10.000 euros más?
Pues en este caso, lamento decirte, que las opciones pueden decantar la balanza hacia el lado negativo. ¿Motivo? Hablamos de un vehículo que parte, oficialmente, de los 60.145 euros. Es un compacto familiar deportivo exclusivo, es cierto. Pero nos movemos en cantidades más propias de berlinas de representación que de un compacto familiar.
Debemos hacer esta aclaración, porque si se te ‘va’ la mano con las opciones, estaríamos hablando de un Golf Variant R próximo a los 70.000 euros… y eso sí que ya nos parece una cantidad desorbitada para el vehículo del que estamos tratando.
Volkswagen Golf Variant R 2.0 TSI 320 CV DSG7 4Motion
- Motor: Gasolina, 4 cilindros en línea, turboalimentado, 1.984 cm³
- Potencia: 320 CV
- Par máximo: 420 Nm entre 2.100 y 5.350 rpm
- Caja de cambios: Automática de doble embrague DSG, 7 velocidades
- 0-100 km/h: 4,9 s
- Velocidad máxima: 250 km/h (autolimitada)
- Consumo: 8,0 l/100 km
- Tracción: Total 4MOTION
- Longitud: 4,64 m
- Anchura: 1,79 m
- Altura: 1,46 m
- Peso en vacío: 1.544 kg
- Número de asientos: 5
- Capacidad del maletero: 611 l
- Precio base: 60.145 euros
