Es amplio, tiene mucha calidad, suma kilómetros de una manera espléndida, no gasta mucho... ¡Una gran compra!
- Galería: Prueba Volkswagen Arteon R-Line 2.0 TSI 190 CV DSG
- Volkswagen Arteon: espacio interior y maletero
- Diseño deportivo R-Line
- Volkswagen Arteon: interior
- TSI 190 CV con DSG, ¡gran dúo!
- ¿Cómo va el Volkswagen Arteon?
- Precio Volkswagen Arteon R-Line TSI 190 CV
Junto con el Touareg, el Arteon es la viva demostración de que Volkswagen puede rozar perfectamente el segmento premium cuando le permiten aplicar toda su tecnología y no hay cortapisas en el ámbito del diseño. En esta prueba, no nos cuesta admitir que nos hemos vuelto a quedar prendados de este vehículo, pues no es la primera vez que lo conducimos.
Es más, yo no me iría a un coche premium teniendo este modelo algo más barato, la verdad, aunque es una opinión personal. Obviamente, tiene ciertas ‘limitaciones’ frente a modelos de Audi, BMW o Mercedes-Benz, como por ejemplo que solo se puede adquirir con motores de cuatro cilindros o que únicamente disponga de tracción delantera (excepto el R de 320 CV), aunque son detalles no definitivos.
Galería: Prueba Volkswagen Arteon R-Line 2.0 TSI 190 CV DSG
Volkswagen Arteon: espacio interior y maletero
Frente al Audi A5 Sportback con plataforma MLB y motor en posición longitudinal, el Volkswagen Arteon recurre a la arquitectura MQB, también pensada para modelos de inferior categoría, y al propulsor transversal. Esta configuración mecánica le permite ganar valiosos centímetros en el habitáculo, hasta el punto de que el espacio interior es enorme.
Siguiendo con los datos prácticos, el maletero también resulta especialmente amplio, con 563 litros o 1.557 abatiendo los asientos traseros. Además, se accede a él a través de un gran portón, lo que facilita mucho la tarea de carga y descarga. A cambio, ten cuidado en garajes con techos bajos para no rozarlo.
Diseño deportivo R-Line
Basta un vistazo a las fotos para comprobar que el acabado de aspecto deportivo R-Line le sienta a las mil maravillas al coche, si bien me siguen chirriando los embellecedores traseros que simulan salidas de escape. Con lo bien que le sentarían un par de colas cromadas… Personalmente, el frontal me sigue fascinando, con esa gran parrilla de listones cromados horizontales que se unen a los faros. Si te gusta el color rojo metalizado, hay que desembolsar 895 euros.
Las ventanas carecen de marco, al más puro estilo deportivo, pese a lo cual apenas entra ruido aerodinámico por ellas a velocidades de crucero, síntoma de lo bien trabajado que está el coche y lo bueno que es a la hora de viajar.
Volkswagen Arteon: interior
En cuanto al interior, la instrumentación digital configurable Digital Cockpit Pro, de 12,3 pulgadas, y la pantalla táctil de 8,0 pulgadas vienen de serie. Quizá este monitor no es especialmente grande para lo que es habitual hoy en día y está situado en una posición algo baja para la vista del conductor.
Por su parte, el climatizador viene con mandos táctiles, de aspecto más moderno y de fácil uso, mientras que hay botones convencionales alrededor del selector del cambio DSG. A mí me gusta esta configuración más analógica que, por ejemplo, la del Golf, en la que prácticamente todo pasa por la pantalla central. El navegador es de serie, al igual que la conexión inalámbrica para teléfonos móviles con los protocolos Android Auto y Apple CarPlay.
En general, la factura es buena y tan solo nos parece mejorable el Head-up Display, que proyecta los datos en un cristal y no directamente sobre el parabrisas. Personalmente, me hubiera gustado que los asientos pudieran estar en una posición algo más baja, como por ejemplo en un BMW, si bien esa ya es una petición algo personal y que puede que tú no lo veas así.
TSI 190 CV con DSG, ¡gran dúo!
Sí, porque reproducir los 7,2 litros cada 100 kilómetros oficiales de media no es especialmente complicado en viajes interurbanos. Lógicamente, al meternos en la ciudad la cifra sube algo, pero nos han sorprendido gratamente los registros. Al final, una berlina es mucho más aerodinámica que un SUV y eso se tiene que notar sí o sí.
¿Cómo va el Volkswagen Arteon?
Por rendimiento, vas a comprobar que el Volkswagen Arteon anda sobrado, como lo demuestra la aceleración de 0 a 100 km/h en 7,7 segundos. Y todo, con una suavidad pasmosa, tanto del motor a la hora de subir de vueltas como del cambio al engranar marchas. Por cierto, dispones de levas para sentirte más protagonista de la conducción, por ejemplo, en zonas de curvas.
Hablando de curvas, la berlina germana tiene un puntito dinámico divertido con la suspensión en la posición más firme posible y gracias también a la dirección progresiva (de desmultiplicación variable), esta última de serie. Incluso podemos añadir el control electrónico del diferencial XDS por 240 euros, que simula la acción de un autoblocante utilizando los frenos. Y por si fuera poco, tenemos discos de freno ventilados en ambos ejes.
No es su terreno predilecto, pero el Arteon no sufre fuertes inercias concatenando giros y las trayectorias suelen ser certeras. Eso sí, donde brilla especialmente es sumando kilómetros como un ‘poseso’ en largos viajes, con un aplomo y una calidad de rodadura de altísimo nivel. Además, ir en una posición mucho más baja que en un SUV aumenta la vivencia deportiva, sin ir necesariamente en perjuicio de la visibilidad.
Además, con los programas de conducción Eco, Comfort, Normal, Sport e Individual, que vienen de fábrica, puedes adaptar el coche a tus gustos… o al de los ocupantes, según sean de exigentes. En cualquier caso, siempre viene bien tener varios coches en uno, ¿no te parece?
Precio Volkswagen Arteon R-Line TSI 190 CV
Antes de finalizar, quiero citar algunas cosas interesantes del equipamiento de serie, además de todo lo que he escrito con anterioridad. Por ejemplo, el climatizador de tres zonas, la cámara de visión trasera, el mantenimiento de carril (se desactiva con facilidad si así se desea), los sensores de aparcamiento delanteros y traseros, los faros LED o las lunas tintadas.
El precio de esta versión asciende a 57.610 euros, que no es poco, pero sí menos que lo que piden otras marcas premium por berlinas con un aspecto menos pasional y algo peor equipadas de fábrica. Sin duda, el Volkswagen Arteon es un gran coche para plantarle cara a cualquier SUV superventas y que, por si te vale el dato, probablemente nos lo quedaríamos en nuestros garajes particulares.
