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Prueba smart #1 BRABUS 2024: ¡qué locura de prestaciones!

Seguro que retendré en mi memoria este SUV urbano que hace el 0 a 100 en 3,9 segundos y está por debajo de los 50.000 euros.

prueba smart #1 brabus 2024: ¡qué locura de prestaciones!

A lo largo de los años, en el mundo del automóvil se ha demostrado que se puede salir de lo establecido con coches icónicos. El smart #1 BRABUS no quedará para los anales de la historia, pero desde luego, permanecerá en el recuerdo de todos aquellos que lo conduzcan.

Porque, ¿qué sentido tiene un SUV urbano eléctrico con 428 CV combinados, capaz de hacer el 0 a 100 en 3,9 segundos y ser casi tan crítico como un superdeportivo sin ayudas electrónicas de seguridad? Posiblemente, ninguno, pero puedes adquirirlo repleto de equipamiento por un precio que, salvo su ‘primo’, el Volvo EX30, no lo encontrarás igual en el mercado.

Antes de meternos más en faena, conviene recordar que la nueva smart es una marca compartida al 50% por Mercedes-Benz Group AG y el gigante chino Geely, que ya te sonará por poseer Volvo, Lotus y ser el tercer máximo accionista de Aston Martin. El EQ fortwo es historia y ahora comercializa dos todocaminos, el propio #1 y el #3, con línea coupé.

El smart #1 BRABUS, en cinco puntos clave:

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37 Fotos prueba smart #1 brabus 2024: ¡qué locura de prestaciones! prueba smart #1 brabus 2024: ¡qué locura de prestaciones! prueba smart #1 brabus 2024: ¡qué locura de prestaciones! prueba smart #1 brabus 2024: ¡qué locura de prestaciones! prueba smart #1 brabus 2024: ¡qué locura de prestaciones! prueba smart #1 brabus 2024: ¡qué locura de prestaciones! prueba smart #1 brabus 2024: ¡qué locura de prestaciones!

Diseño

Más que un todocamino con altas prestaciones y de pura raza, la línea del smart #1 BRABUS se corresponde con la de un modelo con acabado deportivo. No es una crítica, porque muchos preferirán pasar algo más desapercibidos y demostrar lo que tienen en sus manos al resto de conductores con adelantamientos fulgurantes.

En todo caso, el coche es obra de Mercedes-Benz en el apartado del diseño (del resto, incluida la fabricación en China, se encarga Geely) y disfruta de una interesante variedad de elementos especiales, como los paragolpes deportivos, las protecciones de material plástico con insignias BRABUS, las inscripciones en negro, la carrocería bicolor o los faros matriciales CyberSparks.

Si seguimos con las luces, tanto los faros como los pilotos quedan unidos por una tira luminosa y sus formas recuerdan a las de un antifaz. Es más, se produce un haz decorativo al abrirse y cerrarse el coche. El BRABUS incluye también entradas de aire falsas en el capó, así como molduras en los laterales del paragolpes delantero que canalizan aire fresco al sistema de frenos y un marcado spoiler trasero.

Al respecto, smart nos aseguró en la presentación del vehículo que los discos son de mayor diámetro y también tienen un grosor más destacado respecto a la variante de 272 CV. En cualquier caso, son ventilados en las cuatro ruedas y las pinzas vienen en color rojo.

En un vehículo tan prestacional, hay que fijarse en las gomas que monta y, en este caso, son unas Dunlop SportMaxx X060 en dimensiones 235/45 R19, que proporcionan un buen agarre lateral y se montan con llantas bicolor de 19 pulgadas.

Las líneas redondeadas, el techo flotante, las manillas enrasadas en la carrocería y los cristales sin marco son patrones comunes en toda la gama, al igual que la gran batalla de 2,75 metros y los cortos voladizos, fruto de la plataforma SEA, específica para coches eléctricos.

Todo, en un conjunto que no se va más allá de los 4,30 metros de longitud, una cota que hace unos años marcaba la división entre los SUV urbanos y los compactos, pero que ahora es más propia del segmento B y no del C.

Por último, la batería tiene 62 kWh de capacidad útil y se puede cargar a 7,4 kW en 7 horas y 30 minutos, aunque en corriente alterna la potencia máxima es de 22 (tres horas de proceso). Por su parte, en corriente continua, el caso más favorable es un ‘llenado’ a 150 kW, con el que se pasa del 0 al 80% en media hora. ¿La autonomía oficial? 400 km.

Interior

También obra de Mercedes-Benz, el habitáculo presenta la personalización suficiente como para sentirse en un modelo especial. No hay más que fijarse en los asientos deportivos (bastante razonables para un uso diario), el volante forrado en Alcantara, los cinturones de seguridad de color rojo y los pedales ‘metalizados’.

La instrumentación digital alargada de 9,2 pulgadas, la pantalla central de 12,8 y el Head-up Display de 10 confirman el claro ambiente tecnológico. De hecho, los prácticos atajos que hay para elegir los programas de conducción o activar el ‘warning’, entre otras cosas, son también mandos digitales.

Hay una dependencia casi total del monitor central, hasta el punto de que incluso la regulación de los retrovisores pasa por él. También la puesta a punto del coche o el asistente virtual personificado por el avatar de un zorro, con el que se puede interactuar, por ejemplo, dando órdenes de voz.

El equipo de sonido Beats con 13 altavoces, el navegador con ayuda en viaje para parar, recargar y establecer un nivel de carga al destino, el sistema multimedia vinculable con Apple CarPlay y Android Auto o la base de carga inalámbrica marcan una excelente dotación en conectividad y tecnología.

Por su parte, la consola central está sobreelevada, una configuración que permite generar un hueco portaobjetos a ras de suelo y varios en el piso superior.

En materia práctica, el ángulo de apertura de las puertas es bueno, hay bastante espacio en las plazas traseras y, de hecho, estos asientos se pueden regular longitudinalmente y variar la inclinación del respaldo. Así, el maletero oscila entre 273 y 411 litros en función de nuestras necesidades. Por cierto, también hay un pequeño espacio de 15 litros debajo del capó.

¿Cosas curiosas? Los reposacabezas posteriores no se pueden bajar del todo, el suelo es completamente plano y no hay climatizador de tres zonas, sino salidas de aire traseras y dos tomas USB. Al menos, el climatizador viene vinculado a una bomba de calor para perder la mínima autonomía posible.

Volviendo al maletero, se puede generar un doble fondo para guardar cables o también un par de mochilas. Eso sí, la superficie de carga está situada en una posición bastante elevada, aunque a cambio hay una trampilla central para introducir objetos alargados.

Mecánica

Hasta ahora, los smart firmados por BRABUS ofrecían algo más de potencia que el resto de la gama. Por ejemplo, el primer fortwo y el roadster pasaban de 82 a 101 CV, pero en el #1 el incremento resulta incluso desconcertante, pues se escala de 272 CV (una cifra ya considerable) a nada menos que 428.

El SUV ‘inteligente’ emplea esa misma mecánica de 272 CV en el tren trasero y añade otra de 156 en el delantero, para obtener tracción total y generar un total de 543 Nm combinados, disponibles de forma instantánea. Además de los 3,9 segundos en el 0 a 100 antes mencionados, también hay que citar los 180 km/h de punta autolimitada. ¡Qué forma de adelantar y de recuperar velocidad la de este todocamino!

Varios sonidos digitales se pueden vincular a la aceleración. Personalmente, no me entusiasmó ninguno, así que los desconecté, cómo no, a través del menú General de la pantalla central.

El consumo medio queda establecido en 18,2 kWh cada 100 km. Durante la prueba hemos visto cifras muy variopintas, desde los cerca de 30 kWh al coronar el puerto de Navacerrada por la vertiente segoviana, hasta fijar una cifra en el entorno de los 19. Como en un modelo de combustión con altas prestaciones, todo depende de tu tipo de conducción.

En marcha

Al principio hablaba de un SUV crítico y lo es porque, primero, hay que ser plenamente consciente de lo que uno tiene entre manos. Aquí no vale el todo o nada con el pedal del acelerador, porque con la dirección girada, comprobamos que los neumáticos no pueden gestionar esa fuerza bruta instantánea y piden clemencia perdiendo tracción y derrapando.

Por lo tanto, para sacar el máximo partido al smart #1 BRABUS y llevarlo por su sitio, hay que saber dosificar bien la aceleración. Otra cosa es en línea recta, donde sí puedes dar rienda suelta a toda la caballería y comprobar cómo tu espalda queda pegada al asiento en un instante.

Estas brutales prestaciones pueden suponer retiradas de puntos a la mínima insinuación y, sobre todo, implican perder referencias a la hora de frenar en el sitio correcto antes de llegar a una curva, porque verdaderamente las cosas pueden sucederse muy deprisa en este coche.

Con ese potencial, estarás pensando en una puesta a punto específica del chasis, pero, oh, sorpresa, no ha habido ninguna variación respecto al resto de #1. Hablamos, por tanto, de una configuración entre equilibrada y confortable. ¡Que me aspen! ¿Quién ha dado el visto bueno a esto?

En su defensa, he de decir que se puede pasar rápido por curvas y enlazarlas sin movimientos aparatosos, pero el SUV está lejos de ser un tiralíneas en los trazados técnicos. Sorprende para bien el tacto del pedal del freno, firme como en un deportivo de combustión.

Lástima que no haya la posibilidad de anular completamente la retención (la hay media, alta o función ‘one pedal’ llamada S-Pedal a través de la pantalla central, una vez más) y, sobre todo, que no vengan integradas levas para jugar con esa frenada regenerativa. Un vacío inexplicable en un vehículo de estas características.

Por su parte, la dirección de tacto directo y con asistencia variable, sin ser especialmente informativa, no desentona en el conjunto y el tren trasero es de tipo multibrazo. Por supuesto, hay programas de conducción: Eco, Comfort, Deporte (traducción china de Sport) y BRABUS.

A la hora de sumar kilómetros, agradecerás quitar fácilmente el mantenimiento de carril (vivan los atajos) y el buen aislamiento aerodinámico de la cabina, así como la posición ligeramente elevada de los asientos para controlar bien todo lo que hay a tu alrededor.

Como complemento útil, hay diversas configuraciones para, por ejemplo, si nos encontramos con muy poca autonomía (modo Eco+) o si vamos a lavar el coche (modo túnel de lavado). También hay un modo entretenimiento para pasar el rato mientras se carga la batería, entre otros.

Equipamiento y precio

A excepción de la pintura meta opcional, todo lo que puede ofrecer la marca smart lo tiene de serie el #1 BRABUS: umbrales de las puertas iluminados, lector de señales de tráfico, techo panorámico con cortinilla, 64 colores para la iluminación ambiental, acceso y arranque sin llave, asientos delanteros calefactables y un enorme etcétera.

Todo, por 49.900 euros, que implica una relación potencia/desembolso más que interesante. Pero espera, que el coche entra en el Plan MOVES III, con un máximo de 7.000 euros de descuento (aunque ese dinero hay que tributarlo, todo hay que decirlo). De este modo, la cifra arranca en 42.900 euros, que parece una broma tal y como están los tiempos.

smart #1 BRABUS

  • Motor: Delantero transversal, 156 CV, y trasero transversal, 272 CV
  • Potencia: 428 CV combinados
  • Par máximo: 543 Nm combinados
  • Batería: 62 kWh útiles
  • Autonomía eléctrica: 400 km
  • Caja de cambios: Transmisión fija, 1 velocidad
  • 0-100 km/h: 3,9 s
  • Velocidad máxima: 180 km/h (autolimitada)
  • Consumo: 18,2 kWh/100 km
  • Tracción: Total
  • Longitud: 4,30 m
  • Anchura: 1,82 m
  • Altura: 1,64 m
  • Peso en vacío: 1.825 kg
  • Número de asientos: 5
  • Capacidad del maletero: 273/411 l + 15 l
  • Precio base: 49.900 euros

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