Declara 272 CV, pero puede alcanzar los 428 en la versión BRABUS. La autonomía máxima oficial llega a 455 km. ¡Ojo a los precios!
Si en 1998, año del estreno del fortwo, nos dicen que, 26 años después, habrá en el mercado un smart eléctrico, con carrocería SUV coupé, de origen chino (el 50% de la marca pertenece a Geely y la otra mitad a Mercedes-Benz Group AG) y con 4,4 metros de longitud, probablemente nadie nos lo hubiésemos creído.
Pero no hace falta explicarte la revolución que ha experimentado en los últimos años el mundo del automóvil (y lo que nos queda por ver), así que la nueva smart se ha adecuado bien a los tiempos actuales. Primero, con el #1, un práctico SUV urbano, y ahora con el #3, otro todocamino, aunque de línea coupé, que se integra en el segmento C. Lástima que no haya alguna que otra variante electrificada…
Ambos modelos comparten plataformas y potentes versiones de 272 y 428 CV (BRABUS). Sorprendentemente, el mix de ventas de ambas variantes se reparte casi al 50% para cada una en España y no nos extraña, porque la más exclusiva, capaz de acelerar de 0 a 100 en 3,7 segundos, la tienes por sólo 51.900 euros sin descuentos. No encontrarás algo igual por ese coste.
El smart #3, en cinco puntos clave:
Galería: Primera prueba smart #3 2024
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Diseño
Obviamente, smart ha trabajado en dar al #3 una línea más pasional que la de su ‘hermano’ pequeño. No sólo cabe destacar la caída del techo más acentuada, sino también una mayor anchura del conjunto (1,84 metros) y un perfil más aerodinámico.
La parrilla es más grande, mientras que las llantas pueden alcanzar las 19 pulgadas (20 en el BRABUS) y hay incluso colores exteriores mate, que representan las únicas opciones o extras del coche.
Como en el #1, continúan las ventanas sin marco superior integrado y las manillas enrasadas en la carrocería. Los faros pueden contar con tecnología matricial y los pilotos lucen un diseño de píxeles. Como curiosidad, el maletero se abre con un botón escondido en la ‘a’ de la inscripción smart.
La plataforma es específica para modelos eléctricos. Así, las ruedas están colocadas en los extremos y se genera una amplia distancia entre ejes con 2,79 metros. Las baterías, dispuestas en la parte inferior del vehículo, tienen una capacidad de 49 y 66 kWh brutos (47 y 62 útiles).
La primera, de litio-ferrofosfato (LFP), puede cargarse a 7,4 kW en corriente alterna en unas 5,5 horas, o a 130 kW en continua, pasando del 0 al 80% en 30 minutos. La de mayor capacidad, con níquel, cobalto y manganeso (NMC), llega a 22 kW en alterna (3 horas) o a 150 en continua. Las autonomías homologadas oscilan entre 325 y 455 km.
Interior
La cabina del #3 la conocemos del #1, aunque se han introducido varios nuevos elementos, como las salidas de aire circulares. La instrumentación digital continúa siendo de 9,2 pulgadas, mientras que el monitor central y el Head-up Display miden 12,8 y 10 pulgadas, respectivamente.
Smart indica que la posición de conducción se ha bajado, aunque me sigue pareciendo algo elevada incluso para un SUV. La banqueta trasera no se puede regular longitudinalmente, como la del #1, mientras que el espacio posterior es bueno para las piernas, pero no tanto para la cabeza, ya que afecta la línea coupé del vehículo.
Como suele suceder en los coches eléctricos, el suelo es plano (no hay túnel de transmisión) pero se encuentra algo elevado, de tal forma que no se apoyan bien los muslos en las banquetas de los asientos traseros.
En cuanto al maletero, ofrece entre 370 y 1.160 litros, que no es una cifra destacada para un todocamino del segmento C y eso le impide ser un vehículo netamente familiar. Al menos, hay un segundo hueco delantero, con 15 litros, perfecto para guardar los cables de carga.
En materia de conectividad, el #3 estrena un asistente o avatar, en forma de guepardo (en el #1 era un zorro), que entiende bien las órdenes con lenguaje natural. Por supuesto, no falta un sistema multimedia compatible con Android Auto y Apple CarPlay ni la app Hello smart.
Para bien o para mal, casi todas las funciones pasan por la pantalla central, incluso la regulación de los retrovisores. A cambio, hay botones de acceso directo para elegir el programa de conducción o la temperatura del climatizador. Sin embargo, no resulta especialmente sencillo desconectar el aviso acústico del exceso de velocidad, entre otros ejemplos.
Mecánica
Desde luego, el #3 destaca por sus motores potentes. La variante de propulsión trasera con 272 CV acelera de 0 a 100 en tan sólo 5,8 segundos, pero es que la BRABUS de tracción total (272 + 156) completa esa maniobra en 3,7. Como decíamos antes, no vas a encontrar SUV eléctricos tan prestacionales por las tarifas de este smart.
El consumo homologado del BRABUS es de 17,6 kWh cada 100 km y nosotros estuvimos en el entorno de los 21, tras practicar todo tipo de conducciones por carreteras con todo tipo de orografías. Cuando lo conduzcamos por nuestros tramos habituales, volveremos a hablar del tema.
En marcha
Respecto al #1, el #3 tiene una puesta a punto algo diferente, gracias a una suspensión deportiva fija, que no cambia en el BRABUS. Dicha configuración no resulta extrema, pues no se pierde excesivo confort ni convierte el SUV en una ‘tabla’. De hecho, sí se pueden apreciar ligeras inclinaciones al tomar curvas que no van en contra de una más que buena efectividad.
Es más, a pesar de que el chasis no es netamente deportivo, resiste bien las ’embestidas’ mecánicas en situaciones críticas, como por ejemplo al salir rápido de curvas lentas. Por su parte, el tacto de la dirección es bueno, pero en el BRABUS se agradecería una respuesta más directa para concatenar curvas más sencillamente.
Sí se ofrece el sistema de frenada regenerativa, pero un fallo casi imperdonable es que no se pueda gobernar a través de unas levas, que serían realmente útiles y conseguirían aumentar la diversión en la conducción. La función S-Pedal permite prescindir del uso del freno si conducimos con cierta anticipación.
La visibilidad por la luneta trasera es más bien justa y el equipo de frenos consta de discos ventilados en ambos ejes para todas las variantes. En el #1 BRABUS, los discos son de mayor diámetro y grosor, así que suponemos que también se han integrado en el #3 homónimo. En cualquier caso, el coche tiene un buen tacto de frenada en general.
Equipamiento y precio
La gama del #3 comienza en 39.400 euros, sin incluir el Plan MOVES III, y finaliza con los 51.900 euros del BRABUS. Hay una interesante edición especial 25 Aniversario que completa la gama, conformada por las líneas Pro, Pro+ y Premium. Como decíamos antes, no hay extras disponibles, salvo la pintura exterior.
A partir del acabado Premium se incluye la bomba de calor, con la que se pierde menos autonomía al calentar el habitáculo. Obviamente, la opción BRABUS viene convenientemente personalizada con llantas Synchro de 20 pulgadas, pinzas de freno rojas, volante de Alcantara, spoiler de mayor tamaño o insignias exteriores.
Tal y como sucede en el #1, la relación calidad-potencia-precio nos parece sumamente interesante y así es cómo la nueva smart pretende adentrarse poco a poco de nuevo en los mercados europeos.
smart #3 BRABUS
- Motor: Delantero transversal de 156 CV y trasero transversal de 272 CV
- Potencia: 428 CV combinados
- Par máximo: 543 Nm combinados
- Batería: 62 kWh útiles
- Autonomía eléctrica: 415 km
- Caja de cambios: Transmisión fija, 1 velocidad
- 0-100 km/h: 3,7 s
- Velocidad máxima: 180 km/h
- Consumo: 17,6 kWh/100 km
- Tracción: Total
- Longitud: 4,40 m
- Anchura: 1,84 m
- Altura: 1,56 m
- Peso en vacío: 1.835 kg
- Número de asientos: 5
- Capacidad del maletero: 370 l + 15 l
- Precio base: 51.900 euros
