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Los clientes del Mercedes-AMG ONE recibirán sus hypercars muy pronto

Se fabricarán 275 unidades ensambladas a mano de este F1 de calle que homologa una potencia máxima de 1.063 CV gracias a un sistema híbrido inédito en modelos de calle. 50 técnicos especialistas trabajan en este Hypercar que será entregados a finales de 2022.

La primera vez que vimos este proyecto en forma de Concept fue en 2017, tras varios años de puesta a punto al fin ha comenzado la producción de los vehículos para clientes Mercedes-AMG ONE que recibirán su F1 de calle durante la segunda mitad de 2022. A razón de unos 2,5 millones de euros por unidad, tienen toda la producción vendida desde hace mucho.

Esta obra de ingeniería equipa un sistema de propulsión híbrido de altas prestaciones con un motor turbo V6 de 1.6 litros y cuatro motores eléctricos construidos por la división de Motorsport en Inglaterra, exactamente el mismo equipo responsable de desarrollar y producir las unidades de potencia los monoplazas de Mercedes-AMG Petronas F1.

Mercedes-AMG se ha asociado con Multimatic para realizar la producción del modelo en otra ciudad inglesa, Coventry, donde el modelo será ensamblado en una planta diseñada para pequeñas y delicadas series. Pudimos conocer y tocar el coche en este evento que puedes ver en el siguiente vídeo publicado en nuestro canal de Youtube.

Es cierto que en la nueva generación de Hypercars hay algunos modelos que rebasan la cifra simbólica de los 1.000 CV, pero lo realmente interesante de este modelo, es el esquema híbrido empleado debido a la transferencia de tecnología entre su división Motorsport de F1 y la división de modelos de calle. En cualquier caso, sus prestaciones son increíbles, realizando el 0 a 200 km/h en tan solo 7 segundos o, atención, el 0 a 300 km/h en únicamente 15,6 segundos.

Ensamblaje muy meticuloso

No hay otro AMG que sea tan “especialito” como este, es de largo el proyecto más ambicioso de la división deportiva de Mercedes. Como no podía ser de otra manera su producción se realiza a mano, con un equipo de 50 especialistas en un total de 16 estaciones de ensamblaje y testeo.

Algunos elementos del modelo se ensamblan previamente, se prueba su funcionamiento para ser desmontados nuevamente y finalmente instalarse en el vehículo. El monocasco de fibra de carbono y el resto de partes de la carrocería, incluyendo puertas y capó, son los primeros en estar ensamblados. Son revisados para que cuadren a la perfección, como curiosidad en algunos puntos el grosor del carbono es de solo 1,2 milímetros.

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Probando como encaja la carrocería antes de pintarla

Una vez se comprueba que todo encaja, todos los elementos vuelven a desmontarse para ser pintados a mano, incluyendo el logotipo, como en los monoplazas. Por cierto, la pintura que tiene un degradado de estrellas también está pintada a mano.

Mientras tanto llega la hora de probar las unidades de potencia en bancos de prueba por separado y preparar el motor de gasolina V6, la batería de alto voltaje y los diferentes motores eléctricos del sistema híbrido para ensamblarlos en la carrocería ya pintada, que para facilitar el trabajo no tiene ni puertas ni capó. Una vez instalado el sistema de alta voltaje se hace una primera puesta en marcha del vehículo.

Llegados a este punto, es el momento de instalar los paneles de suelo, llantas y neumáticos, que serán regulados acorde a la homologación en carretera junto a los faros delanteros. Pero todavía queda mucho para que el coche pueda ser entregado, antes de ello hay que realizar algunas pruebas finales.

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Revisando el V6 de 1.6 litros de cilindrada

Varias pruebas dinámicas previa la entrega

A continuación el Hypercar es probado en rodillos donde se testean todos sus modos de conducción para comprobar que el flujo de energía y de rendimiento es el esperado. Seguidamente pasa a una prueba de ruidos y vibraciones, y por último a una prueba de lluvia monzónica para comprobar que su interior es totalmente estanco y las zonas con voltaje están correctamente protegidas.

Por si fuera poco, habrá una revisión final visual de todas sus superficies y pruebas técnicas de funcionamiento individual de todos sus componentes. ¿Y ya está? No.

El test final del proceso de producción se realiza en un campo de pruebas cercano, donde cada Mercedes-AMG ONE se somete a una prueba final por parte de un conductor de pruebas de fábrica. Tras recibir su aprobación el vehículo recibe la protección de transporte adecuada y se desplaza en camión cerrado a la sede central de Mercedes‑AMG en Affalterbach. Allí tiene lugar tanto el briefing técnico del vehículo a cargo de los expertos de Mercedes-AMG ONE como la entrega del vehículo a sus ansiosos clientes.

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Revisando el grupo motriz híbrido antes de encajarlo

Fuente: Mercedes-AMG

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