Con los SF90 XX Stradale y SF90 XX Spider, Ferrari lleva su tecnología de circuito a cochs de calle, con una potencia de más de 1.000 CV.
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Ferrari, por primera vez en su historia, ha aplicado su etiqueta «XX», reservada a sus modelos de circuito, a un coche de calle, desvelando el SF90 XX Stradale y su variante descapotable el SF90 XX Spider.
El programa Ferrari XX se ha reservado normalmente a los modelos inspirados en los circuitos, pero estos dos nuevos modelos de Ferrari están homologados para circular por carretera. Llaman la atención en un primer vistazo por sus alerones traseros fijos, una primicia en Ferrari desde el F50 de los años noventa. La carga aerodinámica adicional que esto crea se equilibra con un difusor más grande en la parte delantera y un conducto doble en S inspirado en la F1, que proporciona un 20 por ciento más de carga aerodinámica delantera en comparación con el SF90 normal.
Este SF90 XX Stradale cuenta con unos bajos totalmente cerrados y un suelo optimizado gracias a la reubicación de los radiadores de temperatura media, además de otras características aerodinámicas como las rejillas de los pasos de rueda delanteros y traseros para reducir la presión en los pasos de rueda. El resultado es que el SF90 XX Stradale desarrolla 530 kg de carga aerodinámica a 250 km/h.
Un nuevo dispositivo aerodinámico activo en la parte trasera del coche, denominado «shut-off Gurney», puede desplegarse para reducir la resistencia aerodinámica, permitiendo que tanto el SF90 XX coupé como el descapotable alcancen una velocidad máxima de 320 km/h.
Tanto el XX Stradale como el Spider utilizan una versión optimizada de la cadena cinemática híbrida enchufable del SF90, con un V8 biturbo de 4,0 litros y una batería de 7,9 kWh que alimenta tres motores eléctricos: uno en el interior de la transmisión de doble embrague y ocho velocidades y dos en el eje delantero. La autonomía totalmente eléctrica es testimonial, pero alcanza los 24,5 km.
799 ejemplares del SF90 XX Stradale y 599 unidades del Spider
El motor de combustión desarrolla ahora 786 CV (17 CV más que el SF90 estándar), mientras que los motores eléctricos producen 230 CV, lo que supone un aumento de 13 CV respecto a la variante convencional. Esto contribuye a un aumento total de potencia de 30 CV, hasta totalizar los 1.015 CV, respecto al SF90 Stradale y Spider.
Sus 1.015 CV totales están disponibles en el modo de conducción Qualifying, seleccionable mediante el interruptor del volante eManettino, que da acceso a la función Extra Boost de Ferrari. De este modo, el conductor dispone de un total de 30 «fichas» que se activan al acelerar a fondo cuando el coche detecta que el giro de la dirección es mínimo.
Ferrari afirma que el coche utiliza siete «fichas» en las vueltas a Fiorano, y que el sistema ayuda a recortar un cuarto de segundo el tiempo por vuelta (aún no publicado) en comparación con el SF90 normal. La batería puede recargarse en movimiento utilizando el motor, mientras que al frenar los motores también añaden cierto efecto regenerativo y envían energía a la batería.
Esta potencia máxima se traduce en un tiempo de 0-100 km/h de 2,3 segundos para el SF90 XX Stradale. Este coche acelerará de 0 a 200 km/h en 6,5 segundos, mientras que estos tiempos aumentan ligeramente a 2,4 segundos y 6,7 segundos, respectivamente, para el SF90 XX Spider.
El XX Stradale pesa 1.560 kg, 10 kg más ligero que el SF90 estándar cuando se configura con las opciones ligeras, que incluyen nuevos asientos de fibra de carbono de dos piezas. Ferrari afirma que el V8 también es 3,5 kg más ligero que en el coche de serie, mientras que ha desarrollado una nueva estrategia de cambio para la transmisión con el fin de aumentar la intensidad y el sonido del cambio.
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Ferrari también ha creado un habitáculo más racing a juego con la ingeniería y el diseño exterior más extremos, con un tratamiento más sencillo de los paneles de las puertas, el túnel central y las alfombrillas. Muchas zonas están tapizadas en lo que la marca italiana denomina «tejidos técnicos», y la fibra de carbono se utiliza en zonas funcionales del interior. La parte superior del salpicadero está tapizada en Alcántara, mientras que los paneles cóncavos de las puertas pueden elegirse en color de contraste.
Ferrari sólo fabricará 799 ejemplares del SF90 XX Stradale y 599 unidades del Spider, que tienen un precio de 770.000 euros y 850.000 euros, respectivamente. Desgraciadamente para los que están leyendo este artículo, ya se han vendido todos, y está previsto que las entregas comiencen en Europa en el segundo trimestre de 2024
