Un consorcio de empresas danesas han firmado un importante acuerdo para la puesta en marcha de un proyecto que busca una alternativa económica para almacenar los excedentes de las fuentes renovables, y ofrecer estabilidad a la red. Para ello levantarán una primera instalación que almacenará la energía en forma de calor en sales fundidas.
La idea es almacenar la energía, tanto de las fuentes renovables como del resto de tecnologías, cuando hay menos demanda y el precio es más bajo, para liberarla a demanda cuando la red la necesite proporcionando calor, energía y servicios auxiliares a la red local.
Esta primera instalación entrará en funcionamiento en 2024, y tendrá una potencia de salida de 1 MW y una capacidad de 20 MWh.
La compañía también indica que con 1 GWh sería suficiente como para cubrir las necesidades de 100.000 hogares durante 10 horas, todo en una instalación que no necesitaría más espacio que el solar de una casa familiar.
Almacenamiento en sales fundidas: una alternativa económica y sostenible
Los hidróxidos pueden contener más calor por unidad de sal, lo que los hace más eficientes y reduce la cantidad de sal necesaria en comparación con los usos actuales de sal. Esto reduce el coste de la sal como medio de almacenamiento en aproximadamente un 90%. De esa forma, la empresa espera poder reducir a la mitad el precio de las instalaciones de almacenamiento de energía a largo plazo y a gran escala independientemente de las limitaciones geográficas.
Para los responsables del proyecto, el almacenamiento de energía con sales fundidas tiene otra gran ventaja al ser fácil de escalar en tamaño, por lo que puede construirse para adaptarse a las necesidades de la industria y para el almacenamiento a escala de red para grandes parques eólicos y solares.
Según Seaborg Technologies, que fabrica reactores nucleares de sales fundidas, el sistema de almacenamiento podría tener una pérdida de calor máxima de 0,5% a 1% por día. Los costes deberían ser entre un 30% y un 50% inferiores a los del almacenamiento convencional con sales fundidas. Hyme dijo que cree que podría reducir a la mitad el precio de las instalaciones de almacenamiento de energía a largo plazo y a gran escala, independientemente de la ubicación geográfica.
La clave es el control químico que limita la corrosión de los materiales estructurales en contacto con la sal fundida. Uno de los aspectos que este proyecto permitirá terminar de desarrollar.
Fuente | Seaborg.com