El Toyota FJ Cruiser está todavía presente en la mente de muchos usuarios. Fue para muchos un oscuro objeto de deseo debido a que llegó de forma muy limitada a nuestro país y también por su controvertido diseño. El todoterreno compartía muchos elementos con el Land Cruiser y ganó rápidamente popularidad en mercados como el de Norteamérica, Oceanía u Oriente Medio. También se vendió durante mucho tiempo en Japón, donde finalizaron las ventas hace ya casi un lustro. Ahora se anuncia el final definitivo de su producción a nivel mundial.
Lo ha confirmado recientemente Toyota South Africa Motors, la filial de la marca japonesa en Sudáfrica, uno de los pocos países donde todavía estaba presente. Después de que desapareciese del configurador, la marca afirmó que su producción había terminado en la fábrica de Toyota Hino Motors en Hamura (Japón), donde se hacía desde 2006. La del FJ Cruiser ha sido una despedida paulatina y sin hacer mucho ruido. En 2016 se fue de Australia y Oriente Medio y desde 2018 no estaba en Japón, aunque todavía tenía una presencia residual en mercados como el sudafricano y el sudamericano.
Lo cierto es que estamos hablando de un coche que sorprendió al mundo en el momento de su lanzamiento por su atrevido concepto. Se trataba de un todoterreno con una estética muy llamativa y detalles poco comunes. Son inolvidables sus puertas traseras con apertura inversa o esos limpiaparabrisas triples. También sus capacidades fuera del asfalto, pues siempre presumió de tener una distancia libre al suelo generosa (245 mm) y también de un sistema de propulsión capaz, siempre ligado a una tracción total en condiciones.
Los últimos Toyota FJ Cruiser montaba un motor de gasolina V6 atmosférico de 4.0 litros con 272 CV con la tracción 4×4 y una transmisión automática de cinco velocidades. Aunque en los últimos tiempos se había actualizado con elementos como el sistema multimedia con Apple CarPlay y Android Auto, lo cierto es que se notaba que era un coche de hace casi dos décadas. Ahora solamente nos queda recordarlo con cierta añoranza o adquirirlo en el mercado de segunda mano. En España hay alguno a la venta, aunque los precios no bajan de los 40.000 euros…
Fuente: Cars.co.za
