La octava generación del Serie 5 cobra vida gracias a nuestro render exclusivo. Llegará a principios de 2023 y también será eléctrico.
El debut del nuevo BMW Serie 5 está cada vez más cerca: los avistamientos en carretera se han intensificado en los últimos meses, mientras que los prototipos han ido perdiendo gran parte de su camuflaje.
Línea conservadora
Si, en términos de diseño, los últimos BMW han roto lazos con el pasado (basta con pensar en el estilo poco convencional del Serie 4 o del Serie 7), pero el Serie 5 debería centrarse en reproducir un aspecto más conservador.
El frontal seguirá siendo racional, con la parrilla de doble riñón ampliada (pero no demasiado) en comparación con la anterior generación. La toma de aire inferior, por su parte, podría ser más elaborada y acercarse al estilo del actualizado Serie 3.
El diseño de la berlina también influirá en el Touring y en la versión de batalla larga (vendida exclusivamente en China), que se espera lleguen unos meses después del debut de la carrocería de tres volúmenes.
Motores para todos los gustos
Todos los motores previstos para el nuevo Serie 5, desde los de gasolina hasta los eléctricos, se adaptarán a la plataforma CLAR. Así, la gama de BMW incluirá versiones de hibridación ligera de gasolina y diésel (incluso de seis cilindros), mientras que entre los híbridos enchufables estará el ultrapotente M5 (posiblemente también disponible como Touring) con un 4.4 V8 biturbo electrificado, ya visto en el XM y capaz de alcanzar 750 CV de potencia.
Sin embargo, antes del M5, la firma bávara podría lanzar el M560e, un híbrido enchufable con un motor de seis cilindros en línea, con 3,0 litros de cilindrada y unos 550-600 CV. Por último, el i5 eléctrico estará disponible en varias potencias, hasta llegar a la máxima expresión con el M60 de 600 CV.
Se espera que la presentación del nuevo Serie 5 tenga lugar a principios de 2023, mientras que el eléctrico podría debutar en verano. Aunque no hay nada oficial, como es lógico, los precios de partida podrían rondar los 60.000 euros para los modelos con motores de hibridación ligera de gasolina y los 70.000 euros, en el caso de la versión 100% eléctrica.
