George Foreman es uno de los boxeadores más famosos de la historia, con muchas victorias y un gran palmarés, lo que en este mundillo se traduce en buenas bolsas de recaudación en cada combate. Buena parte de ellas ha ido a parar a una colección de coches enorme, de la que ahora subasta hasta 52 ejemplares.
Se trata de un garaje de lo más diverso, con modelos de todo tipo, coches de serie, otros preparados, algunos directamente a estrenar y otros con muy poco uso. En términos generales están inmaculados, aunque algunos tienen ligeros daños en la carrocería que se produjeron cuando un carrito de golf del boxeador se incendió en marzo de 2019.
Hay incluso motos, como una Harley-Davison Fat Boy, pero el grueso está compuesto por coches, en su mayoría clásicos y modelos icónicos como puede ser un BMW Z8, un Chevrolet Corvette del 58, un Ford Model 18 de 1932, un Tesla Roadster original, un Ford GT de 2005, un Ferrari Testarossa, un rarísimo Chevrolet SSR o un Plymouth Prowler tuneado.
No es de extrañar, pues él mismo afirma ser una suerte de ‘petrol-head’: “He sido coleccionista y entusiasta de los automóviles la mayor parte de mi vida, pero ha llegado el momento de compartir mis coches con otros entusiastas de ideas afines. Poder ofrecérselos a la audiencia de Hagerty de más de un millón de personas es la mejor manera de garantizar que reciban la atención que merecen”.
