La Fórmula 1 y los hiperdeportivos de calle de Aston Martin ya tienen un fuerte vínculo en el Valkyrie, la criatura diseñada por Adrian Newey y forjada por Red Bull en la anterior etapa de colaboración entre ambas entidades. Sin embargo, el siguiente, el Valhalla, tendrá un toque especial: el que le han dado los actuales pilotos de la escudería de Silverstone.
Con la impronta de Alonso
Porque, sí, tanto Fernando Alonso como Lance Stroll han contribuido al desarrollo de las cualidades dinámicas del hermano pequeño del Valkyrie, tal y como ha desvelado recientemente Aston Martin. De hecho, la experiencia obtenida por la marca en Fórmula 1 ha sido aplicada en la configuración final del Valhalla, un deportivo híbrido de nada menos que 1.000 caballos de potencia.
En este biplaza de motor central, aunque lleva en desarrollo desde hace un par de años, ha dado tiempo a que la actual estructura de Fórmula 1 pueda haber intervenido en los estadios finales. Las aportaciones han llegado, sobre todo, en tres apartados: comportamiento, aerodinámica y materiales.
Para el primero de ellos, el de sus cualidades dinámicas, Aston Martin ha empleado el simulador de Fórmula 1 para cincelar sus maneras en pista. De hecho, los técnicos de la marca británica aseguran que el 90% de su puesta a punto se ha realizado en base a las pruebas virtuales realizadas con esta avanzada herramienta.
Aston ha aprovechado las enseñanzas de la F1 para plasmarlas en su nuevo modelo.Aston Martin
Un prodigio aerodinámico
El interior, minimalista casi como un cockpit de un monoplaza, también ha adaptado parte de la ergonomía del AMR23, sobre todo si tenemos en cuenta que el Valhalla va a ser -a buen seguro- disfrutado con cierta frecuencia en un circuito. Otro detalle que le emparenta con el F1 es la toma de refrigeración del techo… o su motorización híbrida, con un V8 asociado a dos motores eléctricos que, en conjunto, se van a los 1.012 CV (cifra que casi calca al Mercedes-AMG One cuyas ‘tripas’ son un auténtico propulsor… de F1).
Y, finalmente, los materiales son clave para crear un coche tan ligero como sea posible pero, a la vez, tan robusto como lo permita la tecnología… exactamente igual que sucede en Fórmula 1. El chasis del Valhalla, como el del AMR23, es un monocasco de fibra de carbono y para la construcción de algunas piezas de la carrocería se han producido en hornos autoclave similares a los que fraguan los componentes del coche de Alonso.
Hablamos de un coche casi de carreras… así que el cockpit se inspira en el de los F1.Aston Martin
Sólo 999 unidades
Por todo ello, el Aston Martin Valhalla se va a convertir en una pieza muy codiciada en los próximos años. Llegará a las carreteras de todo el planeta el año que viene en una tirada muy limitada, tanto que sólo serán 999 afortunados los que podrán lucir uno en su garaje.