Renault 12 TL de 1994 en la planta de Santa Isabel, Córdoba. PH: Renault Argentina.
Se produjeron 440 mil unidades de este vehículo que motorizó a la clase media nacional.
MECÁNICA: La primera generación estaba equipada con un motor 1.300 cc de 54 CV de potencia, en 1976 hubo una actualización en al que la unidad de potencia pasó a ser de 1.400 cc y 74 CV. La versión más “deportiva” fue el Renault 12 Alpine que se lanzó en 1978 y llegaba hasta los 110 CV de potencia. La versión despedida de este auto icónico se produjo en 1994 y se llamó TL: venía equipada con un motor 1.600 cc, que según la configuración entregaba 63 o 77 CV de potencia. La motorización del Renault 12 arrancó asociada a una caja de cambios manual de cuatro marchas y con el tiempo pasó a ser de cinco velocidades, siempre con tracción delantera.
LO MÁS: Un vehículo accesible, que sirvió para motorizar a la clase media argentina y que gastaba muy poco combustible. Ya lo decía su brief: “El vehículo tiene que ser económico y no muy sofisticado, con un espacioso interior y un buen arranque. Será suficiente con un motor pequeño”.
EL DETALLE: en 1984 apareció en nuestro país una versión “de lujo”, denominada GTS, que traía faros dobles circulares, llantas especiales, aire acondicionado y un motor retocado que llegaba a entregar 77 CV de potencia.
CONTEXTO: El Renault 12 llegó en un momento en el que la clase media argentina estaba accediendo a sus primeros autos y a causa de de su precio accesible se volvió uno de los autos más populares del país, una prueba de ello es que este modelo se discontinuó en Francia y en nuestro país tuvo un ciclo de vida de 11 años más, hasta que se dejó de fabricar en 1994. Hace poco surgió una historia especial: un abuelo de General Pico, La Pampa, siempre quiso tener un R12 y nunca se lo había podido comprar, pero su nieto hizo un esfuerzo, adquirió un ejemplar y su historia se volvió tan viral que hasta el mismo Pablo Sibilla, Presidente de Renault Argentina, se encargó de que la empresa restaure a cero ese ejemplar (más info acá)
OPINIÓN: Todos los que tenemos más de 35 años recordamos a algún familiar que tuvo un Renault 12, en mi caso mi abuelo. Siempre me llamaron la atención sus “pestillos” para abrir las puertas y su diseño alargado. Recuerdo que mi abuelo me llevó en más de una ocasión y que el andar era tranquilo y ameno, ahora cuando se lo ponía a más velocidad había que tener cuidado con las curvas cerradas y con la estabilidad. En mi opinión, creo que fue un producto noble y resistente que le sirvió a más de un trabajador para tener su primer auto, y eso en la Argentina no es poco, así que recuerdo a este modelo con el mejor de los cariños.